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   Vol. 69/No. 29           August 1, 2005  
 
 
Pittsburgh: Socialistas logran
victoria para derechos políticos
(portada)
   
POR TONY LANE  
PITTSBURGH, 20 de julio—Declarando que rehusa firmar un “juramento de lealtad”, Jay Ressler, candidato del Partido Socialista de los Trabajadores para alcalde de Pittsburgh, entregó hoy 2 784 firmas en peticiones a la Junta Electoral del Condado Allegheny para que se incluya su nombre en la boleta electoral. Ressler presentó una declaración jurada afirmando que cumple los requisitos para postularse como candidato, pero tachó una sección que le exigía jurar “que no soy una persona subversiva según se define en la ‘Ley de Lealtad de Pennsylvania’ ”. La junta electoral aceptó los documentos.

Mark Wolosik, director de división de la junta electoral del condado, lo confirmó en una entrevista telefónica. “Hemos aceptado los documentos [de Ressler]”, dijo. Cuando se le preguntó si eso significaba que otros candidatos en el condado podían figurar en la boleta electoral sin tener que firmar el juramento de lealtad, Wolosik dijo, “Tendría que confirmarlo con mi departamento jurídico, pero me imagino que podrían, si así lo hicimos en este caso”.  
 
‘Victoria importante’
“Esta una importante victoria contra un intento de reimponer leyes que representan un peligro a los derechos políticos de todo trabajador, sindicalista y defensor de la libre expresión”, dijo Ressler. “Hoy hemos obtenido una victoria en defensa de los trabajadores que se encuentran luchando para defender sus derechos sindicales y para los que promulgan cambios de gobierno”.

Ressler, de 57 años de edad, es un minero del carbón en la mina Madison del condado Cambria, al este de Pittsburgh. El candidato socialista entregó a la junta electoral una carta del abogado de derechos constitucionales Eric Lieberman, de la firma Rabinowitz, Boudin, Standard, Krinsky & Lieberman. El juramento de lealtad es “claramente anticonstitucional de acuerdo a la decisión [de 1974] de la Corte Suprema de Estados Unidos en el caso Communist Party of Indiana v. Whitcomb”, decía la carta. “En 1975 el procurador general del estado presentó una opinión jurídica formal declarando que según el caso Whitcomb, el juramento de lealtad para empleados estatales, que es idéntico a la declaración jurada para los candidatos, es contrario a la constitución y no debe ser aplicado. Lieberman explicó que Larry Boyle, abogado del Buró de Comisiones Electorales en Pennsylvania, había reconocido estos hechos y sugerido que Ressler tachara la sección de “lealtad” en su declaración jurada.

En una conferencia de prensa frente a las oficinas de la junta electoral, el Partido Socialista de los Trabajadores también anunció la nominación de dos candidatos más para las elecciones de noviembre: Cynthia Jaquith, de 58 años, una empacadora de carne que se postula para el consejo municipal de Pittsburgh; y Ryan Scott, de 22 años, un minero postulado como candidato para el consejo del condado. Scott, miembro de la Juventud Socialista, está ayudando a organizar actividades para enviar una delegación de jóvenes al 16º Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes en Caracas.

Ressler entregó a la prensa una declaración firmada por nueve obreros de la mina 84 de la Consol Energy, que protestaban contra el juramento “antisubversivo” porque “va dirigido a intimidar y disuadir de participar en la política a militantes sindicales, activistas por la justicia social y otros más”. Los mineros son miembros del Local 1197 del sindicato UMWA.

Tras revisar las peticiones del PST por más de una hora, los empleados de la junta electoral dijeron que dejaron de contar al llegar a 1 776 firmas, mucho más de las 1 041 requeridas. Añadieron que las firmas podrían ser impugnadas hasta el 11 de agosto.

Después de entregar las peticiones, Ressler fue entrevistado por reporteros de WDUQ; el Tribune-Review, uno de los dos diarios de Pittsburgh; WAMO, una estación de radio orientada a la comunidad negra, y WQV. El reportero de WDUQ le preguntó a Ressler si el cree que sus contrincantes para alcalde usarán su oposición al juramento de lealtad en su contra. “Es posible que lo hagan”, respondió Ressler, “pero tendrán que enfrentar la fuerte oposición del pueblo trabajador a medidas de control de ideas de ese tipo”.

El mismo reportero preguntó si valía la pena llevar a cabo una campaña socialista “cuando está claro que los demócratas tienen las elecciones prácticamente ganadas”. Ressler dijo que sí. “El pueblo trabajador enfrenta una ofensiva implacable de los patrones” dijo. “Impulsados por la necesidad de revertir la caída de sus tasas de ganancias, los patrones están intensificando el ritmo de trabajo, prolongando la jornada laboral, descuidando las condiciones de seguridad en el trabajo, recortando las pensiones y el seguro médico, buscando cómo atacar el Seguro Social y tratando de socavar la solidaridad entre los trabajadores.

“El PST apoya las luchas de los trabajadores para organizar sindicatos y para movilizar la fuerza sindical a fin de defender al pueblo trabajador de los ataques de los patrones y los partidos gemelos del capitalismo: los demócratas y los republicanos. Llamamos a la formación de un partido obrero basado en los sindicatos que luche por los intereses del pueblo trabajador.

“No existen ‘soluciones para Pittsburgh’ a las crecientes crisis económicas y sociales”, agregó Ressler. “Las guerras que Washington y sus aliados están librando en el exterior —desde Iraq hasta Afganistán y otras que están preparando contra Irán y Corea del norte— son una extensión de los ataques dentro de este país contra el nivel de vidas y las condiciones de trabajo de los trabajadores y agricultores. Nosotros exigimos que Washington retire todas sus tropas de estos países: ¡ya!

Joel Britton y Cindy Jaquith contribuyeron a este artículo.  
 
 
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