Página inicial en versión de texto  
the Militant, a socialist newspaper
about this site directory of local distributors how to subscribe submit a photo or image order bundles of the Militant to sell
news articles editorials columns contact us search view back issues
El Militante esta semana
IN ENGLISH
The Militant
ARTÍCULOS DE PORTADA
¡Todo trabajador necesita sindicato, no importa idioma!
¡Solidaridad! Exijamos cursos en español de seguridad en las minas
 
65 mineros del carbón atrapados bajo tierra en México
 
Mueren dos mineros más en Kentucky y Maryland
Massey usará inmigrantes para dividir a mineros
 
Juez rechaza juicio contra dos diarios de Utah planteado por patronal minera  
ESPECIAL ‘Nuestra historia’: para aquellos en las primeras filas de la lucha de clases
FORUMS
CALENDARIO
EL MILITANTE
ENVIAR CARTA AL DIRECTOR
ENVIAR ANUNCIO DE FORO
ENVIAR ANUNCIO PARA CALENDARIO


Un semanario socialista publicado en defensa de los intereses del puebo trabajador
Vol. 70/No. 96 de marzo de 2006

 
(portada principal/editorial)
¡Todo trabajador necesita sindicato,
no importa idioma!
¡Solidaridad! Exijamos cursos en español
de seguridad en las minas
Apoye las luchas de los trabajadores para sindicalizar a todos los mineros, nacidos aquí e inmigrantes, ¡no importa cuál sea su idioma! ¡Solidaridad! A organizar cursos en español sobre seguridad en las minas controlados por el sindicato. Traducir información que requieran los mineros en los idiomas que hablan.

Esa tiene que ser la respuesta del movimiento obrero a los cínicos intentos de la Sidney Coal, subsidiaria de la Massey Energy, de abrir una brecha entre los mineros en Kentucky al oponer a los trabajadores nacidos aquí con los “inmigrantes que no hablan inglés”.

El absoluto desdén de los patrones del carbón hacia los mineros —todos los mineros— no puede estar más claro. Según declaró la Sidney Coal, la “ética laboral” en esa región ha decaído y las “actitudes entre la fuerza laboral actual han cambiado, lo que afecta la asistencia, el uso de drogas y … la productividad”. El desprecio de la Massey hacia los trabajadores de México y del resto del mundo no requiere entrar en detalles.

65 mineros del carbón atrapados
bajo tierra en México

POR ANTHONY DUTROW
Y JOSÉ ARAVENA
 
SAN JUAN DE SABINAS, México, 22 de febrero—El camino hacia la mina no. 8, Pasta de Conchos, donde 65 mineros han estado atrapados desde el 19 de febrero, está bordeado de centenares de autos de familiares y miles de trabajadores más y voluntarios del área, que esperan mientras los socorristas siguen excavando túneles que se derrumbaron tras una explosión de gas grisú. (clic para el artículo)

En medio de una crisis creciente sobre la seguridad en las minas, y la brutal campaña patronal para impulsar la producción y las ganancias, los patrones, con la ayuda de la Administración de la Seguridad y la Salud en las Minas (MSHA) y otras agencias federales, inculpan a los trabajadores. Según ellos, ¡el alcohol y el abuso de drogas son la principal causa de accidentes mortales! Según la prensa capitalista, ¡son los trabajadores inmigrantes quienes reducen los salarios!

Pero es la competencia cada vez más intensa en pos de mercados a nivel mundial lo que está llevando la salud y seguridad de trabajadores y agricultores a la tabla de cortar, junto con los salarios, las pensiones, la atención médica y la más básica dignidad en el trabajo.

La Massey no es pionera de este curso antiobrero. La C.W. Mining, dueña de la mina Co-Op en Utah, ha estado a la vanguardia de los magnates del carbón al superexplotar mano de obra inmigrante y a la vez intentar socavar la solidaridad obrera y prevenir la sindicalización. La empresa despidió a toda su fuerza laboral, en su mayoría trabajadores de México en septiembre de 2003, después que los mineros exigieran condiciones laborales seguras, salarios de vida, dignidad y la representación del sindicato minero UMWA.

Pero los mineros de la Co-Op, cuya mano de obra altamente productiva había permitido a los patrones acumular ganancias año con año, se defendieron.

El abogado de la Co-Op Mark Hansen dijo ante un tribunal en Utah, que los mineros habían enlistado al UMWA para “forzar” a esa empresa a que les diera salarios y prestaciones mayores a los que ellos sabían que “no tenían derecho” ya que eran “ilegales”. El punto es claro: a los trabajadores indocumentados se les puede pagar salarios de muerte, tratar como basura y someter a condiciones mortales, en tanto no armen un alboroto. En tanto no se sindicalicen.

¡Qué mejor argumento para la solidaridad proletaria! Lo mismísimo que el cuadro falso y degradante que los patrones de la Massey pintan de los mineros de los Apalaches como borrachos holgazanes y drogadictos.

Pero son los magnates del carbón quienes cavan sus propias tumbas. Están ayudando a forjar una alianza de mineros y otros trabajadores —de orígenes distintos, blancos, negros, hombres y mujeres— desde los Apalaches hasta las Rocosas y más allá.

La solidaridad es la base del éxito en cualquier lucha obrera. Cuando los trabajadores salen en huelga o luchan para organizar un sindicato, solicitan apoyo y los patrones y su gobierno tratan de bloquear ese apoyo y crear oposición. Lo hacen en gran parte al tratar de valerse de la competencia entre los trabajadores por empleos, oponiendo a un grupo contra otro.

La necesidad de la solidaridad obrera trasciende fronteras, como lo demuestra el desastre minero en México. Los trabajadores en Estados Unidos y nuestros hermanos y hermanas al sur del río Bravo tenemos un enemigo común, las clases patronales, e intereses comunes como trabajadores. Grupo México, cuyo afán de ganancias podría cobrar las vidas de 65 mineros en San Juan de Sabinas, también es la dueña de Asarco, una gigantesca empresa del cobre en Estados Unidos que el año pasado obligó a 1 500 mineros en Arizona y Texas a una huelga de cuatro meses.

Para organizar la solidaridad proletaria en Estados Unidos —y algo clave para echar atrás el debilitamiento persistente del movimiento sindical— es crucial reconocer a los trabajadores indocumentados como compañeros trabajadores en todo sentido y hacer esfuerzos para organizarlos en las filas del movimiento obrero.

No sirve a los intereses del pueblo trabajador exigir a los patrones que dejen de contratar inmigrantes. Al contrario. La internacionalización de la clase obrera en Estados Unidos y demás países imperialistas fortalece a nuestra clase. Al organizar a todos los mineros del carbón y otros obreros —nacidos aquí y en el exterior— los trabajadores podemos integrar a todo el mundo a hacer cumplir la seguridad en el trabajo. Los sindicatos pueden tomar la iniciativa en superar obstáculos de lenguaje al organizar clases de seguridad laboral en español y en otras lenguas, así como al producir volantes en diversas lenguas y facilitar la traducción oral cuando se necesite.

Es así como el UMWA y muchos otros sindicatos se forjaron en Estados Unidos. Por trabajadores de muchos países. Esta es la vía para defender a la clase trabajadora y sus aliados en Estados Unidos y el resto del mundo de los ataques patronales: ya sea de la Massey, la C.W. Mining o Grupo México.
 
 
Related articles:
65 mineros del carbón atrapados bajo tierra en México
Mueren dos mineros más en Kentucky y Maryland
Massey usará inmigrantes para dividir a mineros

Printer logo 
Versión fácil de imprimir de este artículo


 
 
 
 
Página inicial | Página inicial en versión de texto