El Militante (logo)  

Vol. 75/No. 41      14 de noviembre de 2011

 
‘Es valioso poseer
nuestra propia voz’
(portada)
 
POR MICHEL POITRAS  
Al finalizar la cuarta semana de la campaña internacional de siete semanas para ganar 2 200 suscriptores al Militante —entre suscripciones nuevas y renovaciones— hemos alcanzado un total de 1 338, lo que representa el 61% de nuestra meta. La campaña termina el 20 de noviembre.

En Longview, Washington, donde está teniendo lugar una lucha que ya lleva varios meses de los trabajadores portuarios miembros del sindicato ILWU, en contra de los esfuerzos de la terminal de granos de la compañía EGT de destruir el sindicato, la instructora de enfermería Sue Yarbrough decidió suscribirse al Militante cuando los partidarios del periódico de Seattle y San Francisco tocaron a su puerta, escribió Mary Martin.

“Es muy importante que los trabajadores tengan una voz”, dijo Yarbrough. “Tan a menudo no la tenemos. Antes la gente decía que si eras enfermera siempre podrás conseguir trabajo. Hoy día eso no es cierto. Graduamos a cientos de personas que tienen que viajar una gran distancia con la esperanza de conseguir un empleo”.

El equipo en Longview vendió un total de 12 suscripciones en las líneas de piquetes de los miembros del ILWU o a otros trabajadores yendo de puerta en puerta. Junto con las subscripciones también vendieron cinco ejemplares de Rebelión Teamster por Farrell Dobbs, uno de cinco libros que se ofrecen a precio reducido durante la campaña (Vea anuncio en la página 4).

Miembros del Partido Socialista de los Trabajadores han empezado a contactar a obreros azucareros despedidos en un cierre patronal en el área del Red River Valley, cuyas suscripciones están a punto de vencer. Desde el inicio de su lucha a fines de julio, se han vendido unas 150 suscripciones al semanario socialista entre los trabajadores que están involucrados en esta lucha y sus partidarios.

“Durante el fin de semana”, dijo Frank Forrestal “se vendieron cinco renovaciones en Drayton, Dakota del Norte, y Grand Forks del Este, Minnesota”. Forrestal se reunió en Drayton con Clayton Bronson, quien ya había enviado su renovación por correo directamente a la oficina del Militante en Nueva York. “Me gusta leer el periódico porque no te da esperanzas falsas”, dijo Bronson. “Te das cuenta que hay otras personas en situaciones similares y que uno no está solo en el mundo”. Bronson dedica mucho tiempo como voluntario en el tráiler del sindicato para organizar las líneas de piquetes. Varios de los suscriptores han instado a otros obreros azucareros a que se suscriban o a que compren libros revolucionarios de la editorial Pathfinder.

En Miami, un estibador renovó su suscripción en la venta semanal que miembros del PST realizan regularmente frente a la sede del ILWU en Miami. “Ese trabajador”, escribió Tom Baumann, “está colaborando con nosotros para organizar una reunión con su sindicato para hablar sobre la lucha que los trabajadores del azúcar despedidos están librando en el Medio Oeste”.

El grueso de las suscripciones en Miami han resultado de ventas de puerta a puerta, agregó Baumann. “Conocimos a un trabajador no sindicalizado de la compañía telefónica Verizon el sábado en Fort Lauderdale, quien compró una suscripción y Teamster Rebellion, e hizo una donación de 5 dólares al fondo para la construcción del Partido Socialista de los Trabajadores”.

John Steele escribió desde Montreal que él y otros miembros de la Liga Comunista de Canadá fueron a Sudbury, un pueblo minero en el norte de Ontario. El equipo vendió 11 ejemplares del Militante y una suscripción a mineros de níquel frente a dos de las entradas de la mina. “Durante los dos días y medio que estuvimos ahí” dijo Steele, “también obtuvimos una renovación de un trabajador ferroviario retirado y cuatro suscripciones cuando fuimos de puerta en puerta”.

“Además”, escribió, “cuatro suscripciones llegaron de partidarios del Militante en Vancouver, incluyendo dos vendidas a estibadores frente a la salón de contratación, junto con ejemplares en inglés de La clase trabajadora y la transformación de la educación por Jack Barnes”, otro de los libros de venta a precio reducido durante la campaña, “y Trade Unions in the Epoch of Imperialist Decay por Leon Trotsky”, un dirigente central de la Revolución Rusa de 1917.
 
 
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Campaña de suscripciones (semana 4) Octubre 1 a noviembre 20 (tabla)  
 
 
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