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Vol. 75/No. 42      21 de noviembre de 2011

 
Fred Shuttlesworth, luchador proletario
Ayudó a dirigir la lucha por los derechos de
los negros que fortaleció a la clase obrera en EUA
(especial)
 
POR JOHN BENSON
Y JOHN STUDER
 
BIRMINGHAM, Alabama—El reverendo Fred Shuttlesworth, un dirigente central del movimiento proletario de masas por los derechos de los negros que destruyó el sistema de discriminación racial Jim Crow y fortaleció permanentemente la capacidad de lucha de la clase obrera al elevar la auto-confianza de los afroamericanos y sentó las bases para una mayor unidad en la lucha de los trabajadores de todas las razas y nacionalidades, murió aquí el 5 de octubre. Tenía 89 años de edad.

Durante el fin de semana del 22 al 24 de octubre, la familia, ex combatientes y funcionarios de la ciudad de Birmingham organizaron tres días de homenajes, marchas y manifestaciones en esta ciudad para celebrar su vida y las batallas en las que luchó.

Shuttlesworth es mejor conocido por su liderazgo de la confrontación crucial que tuvo lugar en 1963 contra la segregación Jim Crow y la brutalidad racista que pasó a ser conocida como la Batalla de Birmingham.

Esta batalla monumental marcó el comienzo de una nueva etapa en la lucha por los derechos de los negros. Decenas de miles de trabajadores entraron en la lucha participando en acciones de masas y enfrentamientos directos.

Birmingham era un gran centro de industria pesada en el sur de Estados Unidos que era mayormente rural. Tenía la mayor proporción de trabajadores industriales en el país, con una conciencia sindical profundamente arraigada.

Más del 60 por ciento de los trabajadores en las fábricas de acero y las minas de carbón de la zona eran negros. La iglesia bautista Bethel de Shuttlesworth se encontraba en uno de los barrios obreros negros de la ciudad.

En abril de 1963 Shuttlesworth obtuvo el acuerdo de Martin Luther King Jr. y otros líderes de los derechos civiles de apoyar la campaña de Birmingham.

Miles de trabajadores y jóvenes se enfrentaron a los racistas. Cuando la policía, encabezada por el comisario de seguridad pública Eugene “Bull” Connor, trató de arrestarlos a todos, los jóvenes combatientes decidieron abrumarlos. Después de que habían arrestado a 2 400 personas, el gobierno de la ciudad tuvo que confrontar una marcha de 3 mil más. Con sus cárceles repletas, Connor soltó a los perros policía y uso mangueras de alta presión. Los jóvenes continuaban llegando, siguieron habiendo acciones de masas por meses.

Shuttlesworth mismo fue mordido por perros y recibió lesiones el pecho como resultado de las mangueras de agua, terminando en el hospital.

La lucha en Birmingham ocupó los titulares nacionales e internacionales, ganando simpatía y respeto y sirvió de inspiración al pueblo trabajador, a la vez que desenmascaró el hecho de que el gobierno de Kennedy se rehusaba a frenar la violencia represiva contra los trabajadores y los jóvenes.  
 
‘Continuarán las manifestaciones’
En el curso de la lucha el Fiscal General de Estados Unidos., Robert Kennedy llamó a King y lo presionó a que suspendiera las manifestaciones. King aceptó hacerlo.

“Shuttlesworth estaba en el hospital”, relató el reverendo Claude Oliver en un mitin en Birmingham el 22 de octubre. “Bobby Kennedy estaba en el teléfono esperando la decisión. Shuttlesworth se enteró de la decisión y salió corriendo del hospital.

“Shuttlesworth tenía unas palabras bien escogidas para King y le dijo: ‘Usted puede declarar las manifestaciones canceladas, pero van a continuar’”.

King tuvo que decirle a Kennedy que tenía que cancelar el acuerdo.

La Batalla de Birmingham inspiró acciones de masas en ciudades por todo el país, incluyendo los enfrentamientos históricos en Selma y Montgomery, el año siguiente. Estas luchas destrozaron el sistema de Jim Crow y la brutalidad racista organizada para defenderlo, lo que forzó al gobierno federal a aprobar la Ley de Derechos Civiles de 1964 y la Ley de Derechos de Votación de 1965.

Shuttlesworth nació en 1922, hijo de Alberta Robinson, una madre soltera de 22 años de edad, en Mugler, Alabama. Obtuvo su apellido cuando ella se casó con William Shuttlesworth, un minero del carbón. La familia trató de sobrevivir durante la depresión. Shuttlesworth fue sentenciado a dos años de libertad condicional en 1940 por trabajar en la producción ilegal de licor.

En 1943 consiguió un trabajo como conductor de camión en la base Brookley de la Fuerza Aérea. En una de sus primeras confrontaciones políticas, Shuttlesworth protestó una maniobra de los patrones para recortar el sueldo de uno de sus compañeros de trabajo negro.

En 1953 Shuttlesworth se hizo pastor en la iglesia bautista Bethel en Birmingham. No pudo costear un colegio religioso oficial, y obtuvo su título de una escuela no acreditada de predicadores negros.

Se unió a la Asociación Nacional para el Progreso de Gente de Color (NAACP), que estaba desafiando la segregación racial a través del sur de Estados Unidos. Organizó a cientos de trabajadores para que rehusaran usar la sección de “color” en los autobuses de la ciudad y recibió una paliza brutal cuando intentó matricular a sus hijos en una escuela segregada para blancos.  
 
Oficiales atacan a la NAACP
La NAACP fue el objetivo de ataques por todo el sur. En 1956 el fiscal general de Alabama John Patterson demandó a la organización, usando la ley estatal de declaración que se aplica a los negocios. La demanda exigía que la NAACP entregara al estado su lista de miembros. Medidas similares fueron adoptadas en Arkansas, Louisiana, Tennessee, Texas y Virginia. Dada la amenaza de represalias mortales por parte del Klan y la policía, la NAACP se rehusó. Entonces, recibió multas masivas y demandas judiciales, forzándola a cerrar.

Shuttlesworth respondió organizando el Movimiento Cristiano de Alabama por los Derechos Humanos. Una reunión de casi mil personas el 5 de junio de 1956 eligió presidente a Shuttlesworth. El énfasis de la nueva organización era organizar la acción directa.

La noche de navidad de 1956, la casa de Shuttlesworth fue dinamitada.

Después del ataque, Shuttlesworth dijo a sus partidarios, “Lleven sus escopetas a la casa. Esta noche tendremos no-violencia”, dijo James Revis, Jr., en una reunión en la iglesia bautista Bethel el 22 de octubre.

“Aun tengo la escopeta de doble cañón que mi padre uso durante su turno de defensa de la casa del párroco y la iglesia”, dijo George Perdue en la reunión.

Los cuadros que fueron formados en estas luchas fueron la base del movimiento proletario que protagonizó la Batalla de Birmingham.

Shuttlesworth aceptó el puesto de pastor en una iglesia en Cincinnati en 1961, bajo la condición de seguir activo en la lucha en Birmingham.

Continuó luchando contra el racismo y la brutalidad policial, además de salir en defensa de las víctimas de casos amañados por la policía, luchar contra la guerra imperialista y otros problemas sociales.

En abril de 2001 tuvieron lugar protestas en Cincinnati después de la muerte de Timothy Thomas a manos de la policía. Dos dirigentes cubanos jóvenes, Yanelis Martínez y Javier Dueñas, que se encontraban en gira en Estados Unidos, cambiaron su itinerario para ir allá. Shuttlesworth los invitó a su iglesia para discutir la Revolución Cubana. Ellos se enteraron de la lucha contra la brutalidad policial que se desarrollaba en la ciudad, así como de las lecciones de la lucha por los derechos de los negros en los años 50 y 60.

En 2007 Shuttlesworth sufrió un derrame cerebral, y regresó a Birmingham el siguiente año para recibir rehabilitación. Ya no podía hablar, pero siguió luchando contra la opresión racial y a favor de los intereses de la clase trabajadora hasta el final de su vida.

En 2010 Shuttlesworth fue uno de los 11 veteranos de las luchas por los derechos de los negros que firmó un informe de “amigo de la corte” organizado por el Fondo de Defensa Legal y Educación de la NAACP, refutando la decisión de un tribunal del undécimo circuito de apelaciones de que un supervisor de Tyson Foods no era culpable de discriminación racial por decirle “boy” (niño) a un trabajador afroamericano.

El 22 de octubre también se celebró un mitin en defensa de los derechos de los inmigrantes. La protesta fue en contra de la ley antiinmigrante adoptada en Alabama y en la que hubo pancartas prominentes que exigían el fin de “Juan Crow”.

Se guardó un minuto de silencio para celebrar el legado de lucha del reverendo Fred Shuttlesworth. “Shuttlesworth se enfrentó sin temor a los políticos racistas”, explicaba un volante, “e inspiró a millones a salir de las sombras y exigir su dignidad y derechos”.  
 
 
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