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Vol. 75/No. 46      19 de diciembre de 2011

 
Ataque EUA en Pakistán
provoca indignación
(especial)
 
POR BRIAN WILLIAMS  
Ataques aéreos de la OTAN mataron el 26 de noviembre a 24 soldados paquistaníes cerca de la frontera con Afganistán, exacerbando más las tensiones entre Washington e Islamabad. Respondiendo a esta reciente violación de la soberanía de Pakistán, protestas han estallado en varias ciudades y el descontento entre las fuerzas armadas está aumentado.

Washington lanzó el ataque contra dos puestos fronterizos a mediados de la noche, continuando el ataque aún después de que funcionarios paquistaníes pidieron que lo detuvieran. “Funcionarios militares dicen que los puestos fueron atacados sin advertencia a las 2 de la mañana mientras la mayoría de unos 50 soldados dormían”, informó el Wall Street Journal.

Este ataque sucede en el momento en que Washington ha aumentado sus incursiones en territorio paquistaní con fuerzas especiales —incluyendo el asesinato de Osama bin Laden por tropas SEAL de la Armada en mayo— conjuntamente con ataques con aviones teledirigidos.

En Pakistán, en respuesta al asesinato de las tropas, manifestantes se congregaron el 26 de noviembre en Islamabad y Karachi, donde miles se reunieron frente al consulado estadounidense para condenar el ataque, informó el Telegraph. Las manifestaciones continuaron en los días subsiguientes.

Un funcionario paquistaní anónimo dijo al Washington Post que la ira dentro de las filas del ejército paquistaní había “alcanzado un nivel alarmante y la dirección militar estaba muy preocupada por ello”.

El gobierno paquistaní ha cerrado por tiempo indefinido su paso fronterizo para camiones que traen casi la mitad de las provisiones que usa Washington y la OTAN en Afganistán. Una acción similar se realizó en septiembre-octubre del año pasado hasta que Washington se disculpó por un ataque que mató a dos soldados paquistaníes.

En un esfuerzo adicional de aplacar la ira popular, Islamabad le dio a Washington dos semanas para retirarse de la base aérea de Shamsi en el suroeste de Pakistán desde donde son lazados los ataques teledirigidos norteamericanos. Una demanda similar se hizo en junio, la cual fue después abandonada por las autoridades.

Mientras tanto, en la provincia de Kandahar, en el sur de Afganistán, tres días antes del ataque dirigido por Washington en Pakistán, un ataque de la OTAN mató a seis niños, y a otro civil, e hirió a tres niñas, según un vocero del gobernador.
 
 
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