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Vol. 76/No. 22      4 de juno de 2012

 
Obreros de Lockheed en
huelga contra concesiones
Defienden logros ‘ganados con sangre’
(portada)
 
POR JACQUIE HENDERSON
Y CYNTHIA JAQUITH
 
FORT WORTH, Texas—Al grito de “¡De ninguna manera!” los huelguistas que fabrican los aviones caza de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, mantienen la línea de piquetes frente a la planta de la gigantesca Lockheed Martin aquí las 24 horas de día. Los 3 600 trabajadores están en huelga desde el 23 de abril, junto con 150 sindicalistas de la Base Edwards de la Fuerza Aérea en California y 200 en la Estación Aérea y Naval de Patuxtent River en Maryland.

Los trabajadores, miembros del Local 776 del sindicato sideromecánico IAM, rechazaron por un margen del 94 por ciento la propuesta de la compañía, que recortaría el plan de pensiones de nuevos empleados e incrementaría significativamente el costo del seguro médico de todos los trabajadores. También restringiría el acceso de los representantes del sindicato a la planta, dijo el representante regional del sindicato David Hardison.

“No podemos permitir que toquen nuestro seguro médico” dijo al Militante LaDonna Fritchman, operaria de ensamblado eléctrico. “Cuando uno está apretado en la cabina del piloto todo el día y necesita retorcerse y jalar los cables, las rodillas de uno ceden y verdaderamente se necesita un buen seguro médico”.

Según la página web de la unión, casi el 60 por ciento de los sindicalistas en la planta se encuentran ya en una escala más baja de salarios, impuesta en un contrato laboral en 1993. Estos ganan salarios de aproximadamente la mitad o menos que los trabajadores más antiguos. La propuesta de las pensiones ahondaría las divisiones.

“Lockheed siempre ha proclamado que somos un equipo grande”, dijo Rory Miller, trabajador de ensamblaje de fuselaje, al Militante. “No hay equipo, solo ellos y nosotros. Así ha sido siempre”.

Miller gana 32 dólares la hora después de 25 años en la planta. Los nuevos empleados comienzan ganando 8.92 dólares la hora y llegan hasta 18.11 dólares.

El sindicato Teamsters se ha negado a cruzar la línea de piquetes, obligando a la gerencia a tener que recoger la carga fuera de la planta. La huelga ha recibido el apoyo de muchos otros sindicatos.

La sede de la huelga cuenta con una cocina bien provista donde se sirven comidas y refrescos a los huelguistas. Otros sindicatos “han contribuido con donaciones, incluso camiones enteros con agua”, dijo Faith, señalando con la mano miles de botellas de agua almacenadas contra la pared.

Lockheed esperaba que “traicionáramos a los nuevos trabajadores”, dijo David Faith, quien organiza las líneas de piquetes desde el centro sindical. “Pero mi papá peleó por esos beneficios para mí y nosotros continuamos luchando para las futuras generaciones. Estas cosas no las regalan, se conquistan con sangre en la línea de piquetes”.

Para enviar donaciones a los huelguistas y cartas de solidaridad escriba a IAM&AW District Lodge 776, 7711 Clifford St., Ft. Worth, TX 76108
 
 
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