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Vol. 81/No. 27      24 de julio de 2017

 
(portada)

Revierten bloqueo de tres Militantes en prisiones de Florida, retienen dos

 
POR SETH GALINSKY
Funcionarios penitenciarios de Florida revirtieron su censura de tres números del Militante, después que el periódico y por lo menos tres reos apelaran la medida. Los funcionarios mantuvieron la prohibición de otros dos números, en violación del derecho constitucional a la libertad de expresión y a la libertad de prensa.

El Militante se enteró el 23 de mayo que la Institución Correccional de Santa Rosa había confiscado tres números con reportajes que promovían los actos del Primero de Mayo para protestar contra las deportaciones e instar a que se extienda amnistía a los trabajadores inmigrantes. Los censores afirmaron falsamente que los artículos alentaban “un motín, la insurrección” o la “comisión de actividades criminales”. Todas las prisiones de Florida siguieron el ejemplo, según sus reglamentos.

La acusación de que el Militante representa amenaza a la seguridad de la prisión o que promueve disturbios no es cierta, escribió un reo de Florida el 7 de junio después que su periódico fue incautado. Estas son “excusas inventadas y vagas solo porque no están de acuerdo con la posición política que tiene este periódico”.

Varias semanas después que el abogado del Militante David Goldstein del bufete de abogados de libertades civiles Rabinowitz, Boudin, Standard, Krinsky & Lieberman presentó la apelación, las cárceles de Florida incautaron las ediciones 23 y 24, mencionando artículos que cubrían la lucha contra la censura. Partidarios de los derechos políticos, incluyendo la Unión Americana de Libertades Civiles, Pen-America y Stop Prison Abuse, enviaron declaraciones de apoyo a la apelación del Militante.

El 29 de junio, un miembro del Comité de Literatura y Revisión, Charles Huber, informó a Goldstein que la prohibición del número 16 había sido revertida, y el 7 de julio informó que los números 23 y 24 habían sido aprobados también. El comité no dio explicación por sus decisiones. Eso deja los números 15 y 18 aún prohibidos y los 48 lectores del Militante en las prisiones de Florida no los han recibido.

“El Militante seguirá luchando por el derecho de los presos a leer la literatura de su elección”, dijo el director del Militante John Studer. “Podemos anticipar que habrá más censuras arbitrarias a medida que la crisis del capitalismo —y el temor de los gobernantes hacia la clase trabajadora— se profundice en los meses y años venideros, y lucharemos contra ellas”.  
 
 
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