El UMWA comenzó esta campaña, denominada Justicia en Peabody, el 9 de diciembre durante un mitin en St. Louis. Los organizadores dicen que cientos de mineros no sindicalizados han pedido ayuda al UMWA para formar un sindicato.

Peabody Energy declaró ventas de 240 millones de toneladas y 4,6 mil millones de dólares en ganancias en el 2005. La compañía opera 28 minas de carbón en Estados Unidos, nueve de las cuales están sindicalizadas actualmente. Un 36 por ciento de la fuerza laboral de la compañía en Estados Unidos esta sindicalizada, un porcentaje que Peabody ha prometido disminuir.

El presidente de Peabody Gregory Boyce se felicitó diciendo el pasado octubre que "En los últimos 15 años hemos transferido la gran mayoría de nuestra producción y desarrollado nuestras operaciones en lugares donde hemos reducido la intensidad de nuestra sindicalización".. él prometió "continuar sobre ese camino".

En un artículo en la edición de enero-febrero del United Mine Workers Journal, John Cox describió las condiciones de trabajo en la mina no sindicalizada de Peabody en Indiana, donde él trabaja. "Es un mundo completamente diferente", dijo Cox. "No tenemos ninguna seguridad laboral. Ellos pueden venir y decirnos 'muchachos, mañana van a trabajar un turno de 12 horas y no tienen recurso alguno. No tienen ningún derecho. Cállense y hagan su trabajo o se van a la casa'". "Las protecciones en el trabajo es una de las diferencias entre las minas con y sin sindicatos", dijo al Militante Phil Smith director de comunicación del UMWA en una entrevista telefónica el 14 de marzo. "Cuando tienen un comité del sindicato que vela por la seguridad los trabajadores pueden ir a ellos para corregir las condiciones inseguras, y si es necesario, parar la operación insegura. En una mina sin sindicato puedes informarle al patrón, pero si este te ordena a regresar a trabajar, tiene dos opciones, o continuas trabajando en una situación insegura o pierdes el trabajo".

Smith dijo que el interés en organizar sindicatos aumentó después de la ristra de accidentes en las minas este año que costaron las vidas de 21 mineros del carbón. "Nos han llamado muchos mineros, tanto de Peabody como de otras minas, que quieren discutir la diferencia de trabajar en una mina sindicalizada y no sindicalizada", dijo Smith. "Muchos de estos mineros han trabajado en minas con sindicato pero ahora se encuentran en una operación no sindicalizada y ven la diferencia que hace tener un sindicato. Al mismo tiempo los patrones en las minas del carbón no han cambiado mucho en los últimos 100 años. Su meta principal es producir al costo mas bajo posible. Le ponen mucha presión a su fuerza laboral para lograr esta meta".

Además de sus 10 minas no sindicalizadas en Indiana e Illinois, Peabody opera cuatro minas sin sindicato en Kentucky y una en Virgina del Oeste. En el oeste del país las operaciones de la compañía incluyen tres grandes minas de cielo abierto en Wyoming, una subterránea en Colorado, y una nueva mina de cielo abierto en Nuevo México. Todas las operaciones de Peabody en el extranjero, que incluyen cuatro minas en Australia y una en Venezuela están sindicalizadas.

"Por el momento la campaña esta centrada en la minas de Peabody en Virgina del Oeste, Kentucky, Indiana e Illinois", dijo Smith. "Pero hemos hecho contactos en las minas en el oeste y pensamos ampliar nuestro esfuerzo para allí también".

En esta campaña el UMWA ha desplegado docenas de organizadores y funcionarios por todas la zonas mineras. Están usando volantes y un sitio web especial (www.justiceatpeabody.org) para promover apoyo para el esfuerzo.

Organizadores del UMWA están pidiendo a mineros que firmen una petición de apoyo al sindicato. Estas las van a utilizar para presionar a la compañía a que mantenga la neutralidad en cuanto a la recaudación de tarjetas por sindicalización firmadas por los mineros. Esto significa que la compañía esta de acuerdo en aceptar la decisión de una mayoría de mineros que firmen a favor del sindicato en ves de tener elecciones supervisadas por la Junta Nacional de Relaciones Laborales (NLRB).

"El NLRB está controlado por individuos de corte corporacionista y no favorables a que los trabajadores se organicen”, dijo Smith. "Entre apelaciones de la compañía y otras objeciones esto puede demorar cinco, seis, o hasta diez años antes de completar el proceso. En ese tiempo muchas veces los trabajadores son despedidos o reasignados y la compañía tiene tiempo para llevar a cabo una campaña de intimidación entre los trabajadores".

Paul Pederson contribuyó a este articulo  
 
 
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