Vol. 71/No. 18      7 de mayo de 2007

Jessica McGowan/Especial

Procesión fúnebre y marcha de protesta para Ron Pettaway en College Park, suburbio de Atlanta, el 21 de abril. Seis días antes la policía mató a tiros a Pettaway, un joven negro de 26 años, en el club Frozen Palace (al fondo, derecha).

Sus restos fueron llevados desde el estacionamiento del club nocturno Frozen Palace, donde policías del Condado de Fulton lo mataron la mañana del domingo anterior, hasta la Iglesia Bautista de Liveoak, donde se llevó a cabo el funeral.

Varios centenares de personas ya se encontraban en la iglesia llevando la multitud a unas 500 personas.

Convocada como una “marcha por la unidad” el evento fue organizado para demostrar apoyo a la familia Pettaway y protestar su muerte, un caso en una serie de muertes por disparos de la policía aquí. Pettaway fue la decimocuarta víctima de la policía en el área metropolitana de Atlanta en los últimos 15 meses.

Dirk White, de 50 años, vendedor de carros usados en Marietta, no conocía a Ron Pettaway ni a su familia, pero dijo que vino porque ya ha visto suficiente. “Estoy cansado de ver en el periódico cada mes que otro hombre negro ha sido muerto, que todos los testigos digan que estaba desarmado y que nada se resuelva de esto”, dijo al Militante. “El departamento de policía hace la investigación y siempre llegan a la conclusión de que las acciones de los oficiales estaban justificadas”, dijo.

Ron Pettaway Jr., padre de Ron Pettaway, le dijo a los asistentes al servicio fúnebre, “Tenemos que resolver este problema. Sabemos cuál es el problema. El mundo sabe cuál es el problema. Pero, cada vez volteamos la otra mejilla, y ya no hay mejilla que voltear. No odiamos a nadie. Solo queremos justicia”.

Según el médico forense del Condado de Fulton, Ron Pettaway, de 26 años, fue baleado mortalmente en la parte posterior de la cabeza por dos oficiales que habían sido llamados al club para detener una pelea. Su hermano, Roy Pettaway III, de 27 años, también fue baleado y herido cuando fue a buscar a Ron. Ninguno de los dos hermanos portaba armas.

LaShonda Daniels, una testigo, dijo que Ron Pettaway salió del club calmado caminando con la policía. “El no era un criminal, no tenía pistola, nada de eso”, dijo.

Policías del Condado de DeKalb mataron a 12 personas el año pasado. Estas balaceras están bajo investigación. Policías de Atlanta también mataron a Kathryn Johnston, de 92 años de edad, en un operativo de drogas en su casa en noviembre. En este caso, el 25 de abril se convocó a un gran jurado en el Condado de Fulton para considerar cargos de asesinato en contra de tres oficiales de narcóticos.  
 
 
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