Vol. 71/No. 34 17 de septiembre de 2007
Desde el 6 de agosto, cuando los mineros Kerry Allred, Luis Hernández, Brandon Phillips, Carlos Payán, Manuel Sanchez y el capataz de la cuadrilla Don Erickson, quedaron atrapados tras un sacudón masivo, se han perforado siete agujeros desde lo alto de la montaña sin encontrar ninguna señal de los seis hombres. El 16 de agosto, dos patrones y un funcio nario de la MSHA murieron después que ocurriera otro sacudón durante las operaciones de rescate. Cinco mineros y otro inspector de la MSHA también resultaron lesionados.
Algunos de los parientes de los mineros atrapados han insistido que se continue la busqueda. Chris Allred, prima de Kerry Allred, le dijo al Salt Lake Tribune que ella deseaba que la búsqueda no hubiera sido suspendida.
Equipos de funcionarios de minería y políticos del gobierno federal y estatal han sido formados para llevar acabo investigaciones separadas. Una pregunta clave en el derrumbe minero es la decisión de los propietarios de la mina Crandall Canyon, Murray Energy Corp. y su subsidiaria Utah American Energy Inc., con la aprobación de MSHA, de implementar un plan de remover los grandes paneles de carbón, llamados barreras, que sostienen el peso de la montaña. Mineros, ex funcionarios de seguridad de minas y el sindicato UMWA han cuestionado fuertemente esa decisión.
¿Por qué Murray Energy presentó el plan para minar en la Crandall Canyon cuando el dueño anterior de esa mina rehusó minar de la misma manera, diciendo que había un problema con la protección del personal? ¿Por qué la MSHA lo aprobó? dijo un comunicado de prensa de la UMWA el 24 de agosto.
El UMWA rechazó la decisión de MSHA de excluir al sindicato en la representación de las familias de los mineros en asuntos de seguridad, incluyendo una investigación por el sindicato. El UMWA sostiene que bajo la ley federal el sindicato puede intervenir en investigaciones de seguridad si dos o mas mineros o sus familias lo solicitan.
Los funcionarios sindicales dicen que todas las seis familias de los mineros atrapados han firmado documentos designando al UMWA como su representante.
Esto significa que no habrá una voz independiente en la investigación de MSHA, dijo Cecil Roberts, presidente del UMWA. Al negarle a las familias cualquier participación en esta investigación, MSHA esta asegurando que se investigará ella misma en esta tragedia, y los mineros de carbón estadounidenses se merecen más que eso.
Un panel investigador formado por el gobernador de Utah, Jon Huntsman, realizará audiencias públicas en Price y en Huntington, Utah. Dennis ODell, director de seguridad del UMWA, es parte del panel al igual que otros políticos locales.
El 26 de agosto, Murray Energy anunció las cesantías de 170 mineros y el cierre de sus minas Tower y Westridge por problemas de seguridad. La mayoría de los mineros cesanteados rechazaron la oferta de Murray de ser colocados en otras de sus minas en Illinois y Ohio. Solamente una docena de mineros abordaron el autobús fletado con rumbo al Medio Oeste el 28 de agosto, reportó el Salt Lake Tribune.
Omar Reyes, de Huntington, quien trabajó en la mina Westridge, se bajó del autobús y le dijo al Tribune, No quiero ir. Eso es todo. Otro minero hizo lo mismo.
Una docena de ex mineros de Murray participaron en un taller de empleos el 30 de agosto en la oficina local del Departamento de Servicios de Fuerza Laboral en Price.
Pienso que he terminado. He terminado de trabajar para Bob Murray y su compañía, dijo Dustin Montoya al Deseret Morning News. Ellos tratan que uno se sienta mejor, pero ellos realmente no hacen nada para ti, dijo refiriéndose al taller.
Portada (este número) |
Página inicial |
Página inicial en versión de texto