Vol. 73/No. 40      19 de octubre de 2009

Unas 38 millones de personas nacidas en otros países estaban viviendo en Estados Unidos en 2008, 100 mil menos que en 2007, de acuerdo al análisis realizado por el Brookings Institution a las cifras del Censo. Debido a que las cifras son estimados, la caída cae dentro del “margen de error”, pero aún así representa un cambio significante.

Hasta el 2008 la parte de la población de Estados Unidos nacida en el extranjero había crecido cada año desde 1970 tanto en el porcentaje como en números absolutos.

Mientras el número de inmigrantes que entró legalmente a Estados Unidos subió levemente desde 2007 a 2008, el número que entró sin documentos bajó.

El sector de la población inmigrante con mayor crecimiento ha provenido de México. En 1960 los mexicanos eran el 6 por ciento de los inmigrantes en Estados Unidos; para el 2007 eran el 31 por ciento. Cerca de dos tercios de los inmigrantes latinos provienen de México; casi 10 por ciento de los mexicanos viven en Estados Unidos.

Todavía no existe ninguna indicación que estén regresando a sus países un mayor número de inmigrantes.

El agudo recorte de trabajos en la construcción que comenzó en 2005 —antes de la contracción de producción general que comenzó a fines de 2007— afectó fuertemente a los inmigrantes mexicanos y centroamericanos. Casi un tercio de los hombres inmigrantes mexicanos y centroamericanos son trabajadores de la construcción.

En diciembre de 2006, policías de la agencia de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) realizaron redadas simultaneas en las plantas empacadoras de carne de Swift & Co. en seis estados. Más de 1 200 trabajadores inmigrantes fueron detenidos. Cientos más no regresaron a trabajar.

A causa del extenuante ritmo de producción y los bajos salarios, el cambio de personal en las fábricas de Swift es hasta de un 70 por ciento por año. Los patrones de las empacadoras lograron cortar el salario real por casi un 50 por ciento de 1980 hasta 2007 mientras aumentaban el ritmo de producción. La compañía contrató rápidamente a trabajadores blancos, negros y latinos nacidos en Estados Unidos para remplazar a los detenidos en la redada. También contrataron a una gran cantidad de refugiados con permiso de trabajo procedientes de Africa, Burma y otras regiones.

Mientras la administración de Barak Obama ha disminuido las redadas de gran escala, ha aumentado otras medidas como el uso de E-verify, que le permite al patrón revisar si el trabajador tiene permiso para trabajar o si tiene un número de Seguro Social válido, que le dificultan a los trabajadores sin documentos conseguir empleo.

Esta no es la primera vez que el número de inmigrantes y su porcentaje en Estados Unidos baja. Ambos comenzaron a bajar durante la década de 1930 durante lo que se conoce como la Grán Depresión. Esta caída continuó hasta la década de 1970.  
 
 
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