El Militante (logo)  

Vol. 74/No. 22      7 de Junio de 2010

 
Washington, Seúl
amenazan a Norcorea
Anuncian más sanciones comerciales
(artículo principal)
 
POR CINDY JAQUITH  
El 24 de mayo el gobierno de Corea del Sur, con el apoyo de Washington, suspendió casi todo su comercio con Corea del Norte y amenazó con tomar acción militar contra ese gobierno.

Seúl alegó que su agresión era una respuesta a un ataque de un submarino norcoreano contra el buque de guerra surcoreano Cheonan. Murieron 46 marineros cuando el buque estalló el 26 de marzo.

Corea del Norte, también conocida como la República Popular Democrática de Corea (RPDC), negó la acusación. Seúl ha rehusado las repetidas solicitudes de la RPDC de enviar una delegación al Sur para ver las supuestas pruebas de un ataque norcoreano.

Un alto funcionario de la RPDC advirtió que, si las fuerzas de Corea del Sur invaden las aguas territoriales del Norte, “la RPDC aplicará medidas militares prácticas para defender su territorio”, informó la Agencia Central de Noticias Coreana.

El presidente surcoreano Lee Myung-bak declaró que el incidente del Cheonan era una violación del armisticio que puso fin en 1953 a la guerra entre Corea del Norte, por un lado, y las tropas de Corea del Sur y la ONU, por el otro. Esa guerra fue una derrota para Washington en sus intentos de aplastar la revolución de los trabajadores y campesinos que había derrocado las relaciones de propiedad capitalistas en el Norte. El gobierno estadounidense, con la ayuda de sus aliados capitalistas surcoreanos, nunca ha cesado sus amenazas militares contra Corea del Norte. Mantiene 28 mil tropas en el Sur.

Además de las acciones económicas y militares inmediatas, Lee prohibió que los barcos comerciales de Corea del Norte entraran a las aguas territoriales de Corea del Sur. También anunció la reanudación de sus transmisiones radiales de “guerra psicológica” dirigida hacia el Norte y dijo que pronto las tropas surcoreanas y estadounidenses efectuarían ejercicios militares. El presidente dijo que le pedirá al Consejo de Seguridad de la ONU que apruebe nuevas sanciones contra el Norte.

El presidente norteamericano Barack Obama les dijo a sus comandantes militares que trabajaran con Seúl para “asegurar que estén preparados y disuadir la agresión”.

El carácter provocador de las amenazas estadounidenses y surcoreanas se manifestó el 15 de mayo cuando fuerzas surcoreanas dispararon contra dos barcos guardacostas de Corea del Norte que, según alegaron, habían entrado a aguas del Sur.

Después de que hizo explosión el Cheonan a fines de marzo, algunas voces en los gobiernos de Corea del Sur y de Estados Unidos acusaron de inmediato a Corea del Norte. Sin embargo, no se presentó ninguna prueba hasta el 20 de mayo, cuando Seúl anunció que su investigación había mostrado que Pyongyang tenía la culpa. La “prueba” clave era un pedazo de metal, supuestamente de un torpedo que tenía marcas de Corea del Norte.

Un artículo del norcoreano Kim Myong Choi en la edición digital del Asia Times señaló, “El desastre sucedió precisamente en las aguas donde estaba en marcha lo que el Pentágono ha denominado ‘uno de los ejercicios más grandes del mundo’… . Se trataba de decenas de resplandecientes y ultramodernos buques de guerra estadounidenses y surcoreanos equipados con la tecnología de punta”, incluyendo torpedos. El cuestiona cómo un submarino norcoreano pudiera penetrar esas aguas, eludir todos los buques estadounidenses y surcoreanos, lanzar un torpedo contra el Cheonan y escaparse.

Algunos medios de difusión en Corea del Sur también han cuestionado la historia oficial. El Korea Times observó que poco después de hundirse el Cheonan, tanto las autoridades militares estadounidenses como surcoreanas insistieron en que no había habido señales de barcos norcoreanos en el Mar Occidental donde se produjo la explosión. El periódico también preguntó por qué había varios meses de oxidación en la parte de metal y por que las supuestas “marcas norcoreanas” estaban escritas a mano.

El Ministerio del Exterior de la RPDC emitió una declaración el 21 de mayo en que dijo, “La actual administración norteamericana pretende sofocar a la RPDC política y económicamente al internacionalizar las sanciones contra nosotros”. Las acusaciones estadounidenses, añadió, “recuerda el caso de un ladrón que grita ‘¡Alto ladrón!’”.
 
 
Artículos relacionados:
Casa Blanca detalla plan para reforzar amenaza nuclear
¡EE.UU. manos fuera de Corea!  
 
 
Portada (este número) | Página inicial | Página inicial en versión de texto