Vol. 74/No. 27      19 de julio de 2010

19 de junio de 2010

Estimados Antonio, Gerardo, Ramón, Fernando y René:

Los 350 delegados e invitados aquí en Oberlin, Ohio, que hoy concluyen el 46 Congreso Constitucional del Partido Socialista de los Trabajadores les transmitimos nuestros más calurosos saludos revolucionarios. El congreso marcó pasos sistemáticos que el partido está tomando para responder a una pequeña pero creciente vanguardia del pueblo trabajador que está más y más abierta a pensar sobre el carácter de la crisis en la cual ha entrado el capitalismo y sobre qué hacer. La lucha por vuestra libertad ha formado parte integral de estas deliberaciones durante los últimos tres días.

Desde las prisiones en las cuales el gobierno norteamericano los ha mantenido como rehenes por casi 12 años, su inquebrantable espíritu proletario sienta un ejemplo para el pueblo trabajador y la juventud a nivel mundial. Esta valentía, dignidad y decisión les sirve de recuerdo diario a los gobernantes de Estados Unidos de por qué odian y temen a la Revolución Cubana. Reconocen en ustedes a los millones de trabajadores y agricultores en Cuba que—50 años después de tomar el poder e iniciar la revolución socialista en América—continúan repeliendo la incesante demanda imperialista de rendición.

Hoy día, los trabajadores y agricultores en Cuba, Estados Unidos y otros países están viviendo las primerísimas consecuencias de lo que está en camino a convertirse en la mayor catástrofe mundial del capitalismo en la historia. Frente a esa cruda realidad, nunca han sido tan grandes los retos y lo que está en juego en la lucha por defender y hacer avanzar la Revolución Cubana.

El impacto de su resistencia, y de la expansión de la campaña internacional por su libertad, se reflejó en octubre pasado en las palabras de la fiscal federal norteamericana que dijo que hacía falta tratar de callar el "noise and contentiousness" que rodea su injusto encarcelamiento. Han sido reducidas las sentencias draconianas impuestas a Antonio, Ramón y Fernando. Cada hora que se gana es una victoria que refuerza nuestra decisión de aumentar el "noise and contentiousness" hasta el día que cada uno de ustedes esté libre para continuar la lucha desde el exterior de los muros y barrotes del último imperio del mundo, un imperio en decadencia.

Fraternalmente,
Jack Barnes
Secretario Nacional
a nombre de los delegados e invitados al 46 Congreso Constitucional del Partido Socialista de los Trabajadores
 
Artículo relacionado:
Partido Socialista de los Trabajadores celebra 46 congreso constitucional  
 
 
Portada (este número) | Página inicial | Página inicial en versión de texto