Vol. 74/No. 39      18 de octubre de 2010

Veinticuatro mineros del carbón de las minas Cumberland y Emerald de Pennsylvania occidental participaron. “La principal razón por la que estamos aquí es para unirnos a nuestros hermanos por nuestros derechos”, dijo Jeff Marsh, del local 2300 del sindicato minero UMWA. “Nos estamos preparando para la lucha de nuestras vidas cuando se venza nuestro contrato el 31 de diciembre de 2011. Es de suma importancia que todos los sindicatos se unan para asegurar que nuestros hijos puedan ser trabajadores sindicalizados”.

También participaron decenas de miles de empleados públicos y trabajadores de la salud. Muchos de ellos han sido afectados por los recortes impuestos por los gobiernos estatales y municipales por todo el país.

Un grupo de trabajadores de Chicago llegaron vistiendo camisetas que decían “Trabajadores desempleados—CTA”. El pasado febrero la Autoridad de Transito de Chicago (CTA) despidió a casi 1 100 trabajadores, en su mayoría chóferes de auto buses.

Por “empleos” dijo Aisha Kelly, una asistente de enfermería en Philadelphia, de 22 años de edad, que era la razón por la que estaba participando con su sindicato, el Local 1199C. Criando a dos niños, ha trabajado a medio tiempo parcial en los últimos dos años. Nunca ha logrado obtener un empleo a tiempo completo.

Muchos capítulos de la NAACP de las principales ciudades del noroeste enviaron grandes contingentes, pero también lograron atraer a miles desde ciudades y pueblos más lejanos. Setenta y cinco miembros de la NAACP llegaron desde Dallas, Houston y otras ciudades de Texas.

También participaron estudiantes universitarios negros. Brittany Stapleton de la Universidad Winthrop, en Rockhill, Carolina del Sur, llegó en un micro bus con ocho estudiantes. “Los africano americanos somos el 13 por ciento de la población pero el 32 por ciento de los desempleados”, dijo.

Stapleton apoyó a la campaña del presidente Barack Obama en las elecciones del 2008, pero “para la próxima lo voy a pensar con más cuidado. Podría ser más agresivo. Creo que se puede hacer mucho más”.

La convocatoria de la NAACP para la manifestación instó la participación de todos los grupos que enfrentan la discriminación, incluyendo a los “nuevo inmigrantes que están criando a sus hijos bajo la antorcha de la Estatua de la Libertad, mientras enfrentan la penumbra que representan la discriminación y las deportaciones en masa”.

El Consejo Nacional de La Raza fue uno de los grupos pro derechos de inmigrantes que apoyó el evento. El Comité Organizador de Trabajadores Agrícolas también trajo a varios trabajadores. Trabajadores inmigrantes también marcharon orgullosamente con sus contingentes sindicales.

Los oradores en el acto se enfocaron en la importancia de movilizar el voto hacia los políticos Demócratas en las elecciones de noviembre. Ed Schultz, un anfitrión de la cadena MSNBC y uno de los oradores principales, dijo que los Republicanos en el senado “quieren ver que Obama fracase. No podemos dejar que esto ocurra”, pero admitió que aquellos que apoyaron a Obama en el 2008 “no hemos recibido todo lo que deseábamos en los primeros dos años”.

Esta es la segunda ves en menos de dos meses que grandes cantidades de personas han sido atraídas a movilizaciones dada la crisis capitalista económica y social. Una protesta aquí a fines de agosto convocada por el vocero derechista Glenn Beck atrajo a cientos de miles —tanto de clase media así como trabajadores— que están enfrentando las perdidas de sus trabajos, cierres hipotecarios y otras incertidumbres económicas.
 
 
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