Vol. 75/No. 21      30 de mayo de 2011

Militante/Carole Lesnick

Voluntario del Ejército del Militante Paul Mailhot, izquierda, con Tim Cameron, un trabajador mecanometalúrgico, en su hogar en San Francisco el 8 de mayo, un mes después de suscribirse. Cameron compró El rostro cambiante de la política en Estados Unidos, por Jack Barnes, uno de los libros en oferta con una suscripción, y contribuyó 20 dólares al fondo del Militante.

“No sé si los trabajadores ferroviarios todavía usan esta frase”, dijo Swanson, “pero se que cuando fui contratado por primera vez hace más de 50 años, sentía un hormigueo en toda la espalda cuando miraba la luz verde y sabía que la vía estaba libre”. Eso es lo que Swanson siente, dijo, cuando lee los informes de los miembros del Partido Socialista de los Trabajadores y los de otros voluntarios del Ejército del Militante sobre “lo que nosotros como partido y otros tenemos abierto ahora en la línea de marcha de la clase trabajadora”.

Para los voluntarios de este ejército, la nota de Swanson es una guía para lo que se necesita hacer para seguir alcanzando de forma amplia a la clase trabajadora y ganar 2 mil, o más, nuevos lectores y “renovar” a suscriptores al Militante en las próximas semanas, a medida que los trabajadores reaccionan al creciente desempleo, a los aumentos de precios y otras consecuencias de la crisis capitalista que se profundiza. Más y más trabajadores son receptivos a lo que el Militante tiene que decir sobre la necesidad de hacer una revolución para tomar el poder de las manos de los gobernantes capitalistas, para que los trabajadores puedan empezar a reorganizar las relaciones sociales de arriba a abajo.

Recién regresado de un periodo con los infantes de marina, Swanson tomó su primer trabajo en los ferrocarriles en 1960, cuando todavía ayudaba en la granja de su familia en Nebraska. Desde entonces ha trabajado en los ferrocarriles en Missouri, Kansas, Nueva Jersey y California, así como en muchos otros trabajos industriales. Miembro y dirigente del Partido Socialista de los Trabajadores desde principios de los años 1980, él ha sido candidato del partido para gobernador de Nebraska, para Senador de California y para alcalde de Des Moines, Iowa.

“Cuando trabajé en los ferrocarriles hace muchos años”, dice Swanson, “el primero en la cuadrilla en ver la luz verde gritaba, ‘Luz verde, dale al máximo’, y los otros miembros de la cuadrilla también lo gritaban si veían la misma señal”. Ya sea por la noche, o en la niebla o en un sol brillante, gritar esas palabras significaba “que todos estábamos de acuerdo que la vía delante de nosotros estaba abierta para que saliéramos”.

También es una buena consigna para el Ejército del Militante. Porque las experiencias de ir de puerta en puerta vendiendo suscripciones al Militante a trabajadores en las semanas recientes nos están mostrando de forma política que las “vías en frente de nosotros están abiertas para que avanzemos”. La frase capta la confianza entre los voluntarios del Ejército del Militante que están organizando y dirigiendo el esfuerzo para cumplir y superar las cuotas de suscripciones de cada área en todo Estados Unidos y en otras partes.

Swanson ofrece una de sus propias experiencias como ejemplo. El 26 de febrero, reportó Swanson, hubo dos eventos en el capitolio estatal en Lincoln, “un duelo de mítines por los trabajadores”, como lo puso un encabezado del Omaha World-Herald.

A una de las acciones, auspiciada por el grupo liberal MoveOn.org, asistieron unas 250 personas, incluyendo trabajadores y funcionarios sindicales del área. Fue convocada en apoyo a los trabajadores públicos en Wisconsin, quienes se estaban movilizando contra los ataques a sus sindicatos por el gobierno estatal. Swanson continuó:

“Al otro lado del capitolio estatal, había un mitin en contra de la acción pro sindical, organizada por dos grupos que apoyan al gobernador de Wisconsin. Al final del evento de MoveOn.org, unos 25 funcionarios sindicales y otras personas marcharon con sus carteles y gritaron ‘poder sindical’ en las cara de los que participaban en la contra protesta, intentando callarlos.

“Mi auto estaba estacionado cerca de ahí, y pude hablar con algunos de los partidarios de los sindicatos. Vendí otro periódico cuando expliqué que muchos de los participantes de la contra protesta eran trabajadores como nosotros que han sufrido el impacto de la crisis económica capitalista. Les insté a que tuvieran una discusión cortés con las personas del otro mitin, en vez de tratar de intimidarlos.

“Me miraron cuando comencé a hablar con algunos de los participantes en la contra protesta, incluyendo a un trabajador de la construcción cesanteado que compró el periódico. Creo que ese tipo de solidaridad tomó por sorpresa a las personas con quien hablé en ambos mítines”.

Swanson dijo que su “confianza y conciencia de clase al hablar con aquellos en la contra protesta” aumentaron después de asistir a un evento en Nueva York en enero, en el que el secretario nacional del Partido Socialista de los Trabajadores Jack Barnes enfatizó la oportunidad perdida cuando los trabajadores socialistas no organizaron equipos para vender suscripciones al Militante a los trabajadores que participaron en el mitin titulado “Restaurando el honor” convocado por Glenn Beck y otros en Washington el 28 de agosto de 2010.

Muchos de los que asistieron a este masivo evento, dijo Barnes, eran trabajadores, agricultores y otros que han sido golpeados fuertemente por la crisis económica y social. Swanson dice que espera “con entusiasmo la conferencia educativa socialista y de trabajadores activos en Ohio en junio, donde podremos evaluar lo que estamos logrando yendo de puerta en puerta y lo que vamos a hacer después”.
 

A mitad de la campaña de suscripciones de seis semanas, estamos adelantados, con un 57 por ciento de la meta internacional de suscripciones ya vendidas. Al entrar en la cuarta semana, los voluntarios del Ejército del Militante necesitan mantener el ritmo y aumentarlo un poco en Estados Unidos.

Cuatro áreas han aumentado sus cuotas para ayudar en este esfuerzo. Los voluntarios en Auckland, Nueva Zelanda, aumentaron su meta en casi un 20 por ciento a 65 suscripciones, y los de Londres subieron la de ellos de 80 a 90 suscripciones. En Estados Unidos los voluntarios en Miami aumentaron su cuotas de 75 a 85, y los de San Francisco aumentaron la suya por segunda vez a 175.

Continúen enviando reportes sobre las discusiones políticas y debates que tengan durante las ventas de puerta en puerta. ¡Y necesitamos fotografías! Para unirse, contacte el centro más cercano de los listados en el directorio en la página 8.

En solidaridad,

Steve Clark
Director
 
 
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