Vol. 75/No. 24 4 de julio de 2011
La nueva edición de la Guía de Investigaciones y Operaciones Domésticas del FBI la cual pronto será publicada, extiende los cambios que se introdujeron en 2008, que autorizaban a los agentes a realizar investigaciones anticipatorias -eufemísticamente llamadas evaluaciones -sin la menor pretensión de tener pruebas de antemano. El manual de 2008 también le permite a los agentes mantener información sobre individuos sin que se alegue justificación alguna y facilita las restricciones para infiltrar organizaciones y el uso de informantes, entre otras operaciones de espionaje.
Algunos aspectos de las nuevas normas -las cuales la procuradora general del FBI, Valerie Caprone, califica de retoques- fueron explicadas en una reunión entre funcionarios y algunos selectos defensores de la privacidad, informó el Times.
De acuerdo con el Times, los agentes del FBI ya no tienen que registrar las evaluaciones que realizan usando la masiva red de información que tienen a su disposición; así que ya no dejan pruebas de sus actividades de espionaje. Ahora los espías pueden rebuscar en la basura y usar el detector de mentiras contra cualquiera sin que haya ninguna prueba de que se haya cometido alguna infracción, siempre y cuando puedan declarar que tal actividad puede descubrir información que puede ser útil para forzar a un individuo a servir de informante.
Según las reglas del 2008, los escuadrones de espionaje se podían usar solo durante la fase de evaluación. Ahora los agentes podrán realizar espionaje en numerosas ocasiones sin prueba alguna de actividad criminal. Las nuevas reglas también dicen que los espían y provocadores del FBI pueden participar en hasta cinco reuniones de organizaciones sin restricciones antes de que entren en vigencia nuevas reglas secretas que gobiernan tal actividad.
La mayor latitud de estas reglas se produce a la vez que el FBI aumenta los atentados y disrupciones contra individuos y grupos que se oponen a la política del gobierno. El pasado septiembre agentes del FBI irrumpieron en los hogares de 14 activistas anti-guerra en Chicago y Minnesota. Los 14, junto con otros nueve activistas obligados a presentarse ante un tribunal en Carolina del Norte y California, han rehusado dar testimonio ante un gran jurado.
Expanden bancos de información
Las cámaras gubernamentales estatales por todo el país están intentado establecer registros electrónicos de convictos de ciertos crímenes, parecidos a los registros por ofensas sexuales que ya existen por todo el país. Estas listas se sumarán a los crecientes bancos de información del gobierno, sometiendo a los que se encuentran en ellas al hostigamiento incesante de la policía, el espionaje gubernamental y la discriminación en el empleo y la vivienda.
En Illinois, los senadores estatales están debatiendo un registro para los convictos de asesinato de primer grado. La propuesta fue aprobada por la cámara de representantes en abril, con un voto de 97 a favor y 1 en contra. Los que son puestos en libertad se mantendrán en estas listas durante por lo menos 10 años.
En Maine, se está promoviendo un registro de aquellos convictos de conducir intoxicados. En otros estados se están considerando registros para los convictos de incendios, maltrato de animales, o producción de metanfetaminas.
El senado del estado de Nueva York aprobó el 17 de mayo por un voto de 57 a favor y 4 en contra crear un registro de individuos con delitos violentos. Como el registro de delitos sexuales, los incluidos en éste tienen que declarar su domicilio de por vida.
Inescapable la necesidad de luchar por el poder obrero
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