El Militante (logo)  

Vol. 77/No. 26      8 de julio de 2013

 
Corte de bancarrota existe
para proteger a los patrones
 

Los mineros que están luchando contra las empresas de carbón Peabody, Arch y Patriot han podido confirmar cómo los patrones utilizan los tribunales de bancarrota para promover sus ataques antisindicales contra los trabajadores. Muchos trabajadores —en empresas como Hostess Brands en 2012 y Eastern Airlines en 1989— han enfrentado embestidas similares.

El libro de Pathfinder The Eastern Airlines Strike: Accomplishments of the Rank-and-File Machinists (La huelga de Eastern Airlines: Logros de los obreros de base), por Ernie Mailhot, Judy Stranahan y Jack Barnes, es una reseña de la huelga de 22 meses que con firmeza libraron los miembros del sindicato contra la aerolínea Eastern Airlines en 1989–91. La huelga derrotó los intentos del propietario Frank Lorenzo de aplastar al sindicato y lo forzó a abandonar el negocio de las aerolíneas. A continuación publicamos un extracto del libro, que trata sobre el papel de los tribunales de bancarrota. Derechos de autor © 1991 por Pathfinder Press. Reproducido con permiso.
 

*****

Lorenzo esperaba que al obtener la protección del tribunal de bancarrotas, él iba a poder resucitar la aerolínea paralizada. Duramente golpeado por la feroz competencia en la industria aérea, Eastern ya había perdido millones de dólares en años previos. Con las operaciones de Eastern paralizadas por la huelga, las pérdidas de la empresa aumentaban aún más.

Los propietarios de la aerolínea esperaban también que los huelguistas y el pueblo trabajador en general dirigirían su atención hacia las deliberaciones de la corte y no a la huelga. Trataron de convencer a los trabajadores que las decisiones sobre la huelga tendrían lugar en un lugar diferente que las líneas de piquetes y que los trabajadores no podían influir esas decisiones…

El trabajo de las cortes de bancarrotas es muy estrecho, más que el de la mayoría de los tribunales en Estados Unidos. Los dictámenes del juez de bancarrota tienen por objeto proteger el capital social —en este caso, los aviones, el equipo, los sistemas informáticos, las terminales y hangares de Eastern— de acuerdo, en primera instancia, a los intereses de los propietarios de la empresa y los acreedores y, en última instancia, de la clase capitalista en su conjunto. El tribunal no tiene nada que ver con los intereses de los trabajadores sindicalizados o del pueblo trabajador en general…

Aunque en un principio muchos huelguistas se vieron atraídos a seguir todos los detalles del proceso del tribunal de bancarrota, esta actitud se disipó rápidamente. A medida que se pronunciaban decisiones que iban en contra de los intereses de los sindicatos, los huelguistas comenzaron rápidamente a darse cuenta que los tribunales no eran imparciales. Los sindicalistas siguieron presionando, se mantuvieron firmes en la huelga y siguieron ganando solidaridad amplia.
 
 
Artículo relacionado:
Mineros protestan ataque anti sindical de tres empresas del carbón
 
 
 
Portada (este número) | Página inicial | Página inicial en versión de texto