Vol. 77/No. 31      26 de agosto de 2013

Militante/Asha Ramachandra

Margaret Trowe, candidata del PST para Consejo Municipal de Des Moines, presenta campaña socialista a trabajadora jubilada Essie Benson. Benson se suscribió al Militante y fue una de 425 personas que firmaron para que los candidatos del PST aparezcan en la boleta electoral.

POR DAVID ROSENFELD
DES MOINES, Iowa—“El enfoque de nuestra campaña ha sido ir de puerta en puerta para hablar con trabajadores por toda la ciudad”, dijo Margaret Trowe, una de los tres candidatos del Partido Socialista de los Trabajadores para el concejo de esta ciudad, a las 30 personas reunidas en la sede de la campaña el 10 de agosto para participar en una cena y un mitin de recaudación de fondos donde escucharon a los candidatos y discutieron sobre la campaña de recolección de firmas para ponerlos en la boleta electoral.

“Decidimos organizar la recolección de firmas para la boleta electoral de la misma manera”, dijo Trowe, “y fue un éxito rotundo”.

Cuatrocientas veinticinco personas firmaron en Des Moines para poner a Trowe, Ellen Brickley y David Rosenfeld en la boleta, casi el doble de la cantidad requerida. Veintiún voluntarios de Omaha, Nebraska; Twin Cities, Minnesota; Chicago y Nueva York se sumaron a los partidarios de la campaña de Des Moines.

“Hablamos con trabajadores sobre la necesidad de luchar por un aumento al salario mínimo y por un programa masivo de empleos financiado por el gobierno”, dijo Brickley a los presentes en el mitin.

“Yendo de puerta en puerta tuvimos muchas buenas discusiones sobre lo que los trabajadores están pasando, lo qué están pensando y sobre nuestro programa para forjar la solidaridad obrera y la confianza en el proceso de la lucha por el poder obrero. Casi todos con quienes hablamos firmaron nuestras peticiones”.

Durante la campaña, los partidarios vendieron 13 suscripciones al Militante, 31 ejemplares del periódico y cinco libros, incluyendo Malcolm X, la liberación de los negros y el camino al poder obrero y Los Cinco Cubanos.

Muchos en el mitin del sábado por la noche estaban deseosos de compartir las experiencias de ese día yendo de puerta en puerta para hablar con trabajadores.

Fein y su colega de campaña Jacquie Henderson hablaron con la mesera Kelly Vincent en el portal de su casa sobre la lucha de los trabajadores de comida rápida por un salario de 15 dólares la hora y un sindicato. “Yo estoy muy de acuerdo con eso”, dijo Vincent, quien gana 4.35 dólares la hora. “Ellos dicen que podemos completar la diferencia al salario mínimo de 7.25 por hora con las propinas. Pero no podemos vivir con eso”.  
 
 
Portada (este número) | Página inicial | Página inicial en versión de texto