El Militante (logo)  

Vol. 77/No. 43      2 de diciembre de 2013

 
Costureros en Camboya luchan
por alza de salarios
(portada)
 
POR EMMA JOHNSON  
Al empezar el tercer mes de una reñida lucha en Phnom Penh, Camboya, contra la compañía SL Garments Processing, una de las fábricas de producción de ropa más grandes del mundo, el gobierno está incrementando su apoyo a los patrones. La policía abrió fuego contra una manifestación sindical el 12 de noviembre, causando la muerte de un transeúnte que pasaba por allí. Además, por los menos 20 trabajadores resultaron heridos.

Los trabajadores de la costura están luchando por salarios más dignos, más seguridad en las condiciones de trabajo y protección sindical. La planta, cuyos propietarios son de Singapur, emplea a casi 6 mil trabajadores que producen para H&M, Gap y Levi’s. Los trabajadores empezaron la huelga el 12 de agosto, exigiendo un aumento del salario mínimo de 80 a 150 dólares al mes, un estipendio de almuerzo de 3 dólares, que se saque a la policía militar de la planta y que se despida y se terminen todo tipo de relaciones con el consejero y accionista Meas Sotha, a quien los trabajadores asocian con el uso de la policía militar en la planta.

Los trabajadores terminaron la huelga el 30 de agosto después de un mitin con representantes del sindicato, funcionarios de los patrones y el gobierno municipal de Phnom Penh. Cuatro días después la compañía despidió a 700 trabajadores. Al día siguiente, 4 mil trabajadores marcharon al ayuntamiento de Phnom Penh para exigir la intervención del gobierno, después de lo cual el gobierno de la ciudad ordenó a SL Garment que restituyera a todos los trabajadores. La compañía respondió cerrando la producción, estableciendo de facto un cierre patronal.

Desde entonces ha habido negociaciones, observadas por funcionarios gubernamentales, entre la compañía y la Coalición de Sindicatos de Trabajadores de Ropa Democrática Camboyana —la más grande de las tres uniones en la planta, con más de 2 500 miembros. Funcionarios de Mejores Fábricas Camboya de la Organización Obrera Internacional y de la Fundación del Consejo de Arbitraje de Camboya han funcionado como mediadores.

“Los dos grupos propusieron llevar 19 dirigentes sindicales y activistas ante el Consejo de Arbitraje para decidir si serán restituidos,” dijo el vicepresidente del sindicato Kong Athit en una entrevista telefónica el 11 de noviembre desde Phnom Penh. “Nosotros no aceptamos esto. La compañía quiere despedir a estos trabajadores, es parte de un plan rompehuelgas. Se quieren deshacer de todo el comité sindical. ”.

Athit dijo que el asunto más importante para el sindicato siempre ha sido deshacerse de la policía y del accionista Meas, quien la trajo a la planta.

“Después de que rechazamos poner a nuestros miembros ante del Consejo de Arbitraje, la compañía propuso que si aceptamos despedir a los 19, ellos despedirán a Meas”, dijo Athit. “Dijimos que no. Tenemos que rechazar esto. Después de esto podemos empezar a hablar de otras cosas. Mañana marcharemos a la residencia del primer ministro para presionar por una solución”.

El día siguiente unos mil trabajadores participaron en la marcha. Cientos de policías antimotines que pululaban por las calles capitalinas atacaron a la marcha con cañones de agua, gas lacrimógeno, balas de goma y balas de verdad. Mataron a una mujer que vendía arroz en la calle y más de 20 personas terminaron en el hospital con heridas de balas.

Esta fue la más reciente protesta que el sindicato ha organizado desde que los trabajadores salieron a la huelga. Kong Athit dijo que algunos trabajadores han regresado al trabajo y unos 1 500 ahora están trabajando.

La industria de la costura, la cual representa el 80 por ciento del total de las exportaciones de Camboya, emplea 500 mil trabajadores en más de 500 fábricas de ropa y zapatos, con un promedio de mil trabajadores cada una. Más del 90 por ciento son mujeres de aldeas rurales que se mudan a los recién creados centros de producción industrial. El 90 por ciento de las fábricas carece de contratos sindicales.

El número de huelgas y marchas en las fábricas de costura se ha cuadruplicado durante el último año.
 
 
Artículos relacionados:
Trabajadores en Memphis luchan contra cierre patronal de Kellogg
 
 
 
Portada (este número) | Página inicial | Página inicial en versión de texto