Vol. 79/No. 10 23 de marzo de 2015
POR NAOMI CRAINE
“Queremos demostrar nuestro apoyo a los judíos después de lo que sucedió en Copenhague”, dijo Hibaq Farah, una joven estudiante musulmana, al explicar por qué participó en un “anillo de la paz” alrededor de la principal sinagoga en Oslo, Noruega, el 21 de febrero.
En respuesta al asesinato el 15 de febrero de Dan Uzan, un judío danés que era un guardia voluntario en una sinagoga en Copenhague, por Omar el-Hussein, un autoproclamado partidario del Estado Islámico, varios jóvenes musulmanes en Noruega establecieron una página de Facebook para organizar el evento. “Los musulmanes mostrarán que nos distanciamos totalmente de toda clase de odio contra los judíos”, dijeron.
Más de mil personas se congregaron para apoyar la actividad, la cual fue organizada con pocos días de aviso. Decenas de jóvenes musulmanes se unieron de la mano y formaron una cadena afuera durante servicio del sábado para oponerse a los ataques antisemitas y defender el derecho de los congregantes de practicar su religión.
“¡No al antisemitismo, no a la islamafobia!” fue una consigna popular.
“Nosotros los musulmanes conocemos muy bien lo que es ser discriminado”, dijo en el mitin Hajrah Arshad, de 17 años. “No lograremos nada si no nos unimos”.
“Ésta es la mejor respuesta posible que podemos dar a la polarización que hemos visto en los debates después de los atentados en Francia y Dinamarca”, dijo Youssef Bartho Assidiq, otro participante, a la Agencia France-Presse, refiriéndose también al asesinato de cuatro judíos en un supermercado kosher en París en enero.
Hay aproximadamente 1 300 judíos en Noruega, en una población de 5.3 millones. En 2008 un islamista noruego fue condenado por un ataque con disparos contra la sinagoga de Oslo dos años antes. Nadie murió, pero el edificio fue dañado.
Otro de los organizadores de la actividad fue Muhammed Ali Chishti, quien en 2009 dio una charla titulada, “Por qué odio a los judíos y a los homosexuales”. En recientes entrevistas con la prensa, dijo que sus declaraciones anteriores eran “antisemitas” e “inaceptables” y que sus opiniones han cambiado. “Estaba muy enojado en aquel momento” por los ataques del gobierno israelí contra los palestinos en Gaza, dijo, y agregó que “mucho de lo que dije estaba basado en teorías de conspiración”.
Pero hoy en día “hay muchas señales de una peligrosa polarización entre las religiones en Europa”, dijo Chishti. “Es importante demostrar que no somos intolerantes”.
Greg McCartan en Oslo contribuyó a este artículo.