Vol. 72/No. 21      26 de mayo de 2008

Los trabajadores debemos rechazar esta miseria, que representa una treta de la clase patronal para convencernos de que el gobierno está haciendo algo para paliar la caída de nuestro nivel de vida.

Instamos a nuestros lectores a que hagan buen uso de este dinero manchado de sangre: ¡contribúyanlo al Militante!

El “estímulo” —entre 300 y 1 200 dólares— que recibirá la mayoría de los trabajadores desaparecerá en un santiamén. Para colmo, una parte importante de nuestra clase, la que carece documentos aceptados por el gobierno, quedará excluida.

Ante la caída de nuestros salarios reales y el aumento implacable del combustible, la comida, los costos médicos y el alquiler, lo que necesitamos no es un chequecito único. Necesitamos una verdadera protección de nuestro nivel de vida: una escala móvil de salarios que se ajuste automáticamente al costo de vida, y una reducción de la jornada laboral sin reducción de salarios para distribuir los trabajos entre todos.

Los patrones ofrecen “bonos por la firma del contrato” en vez de aumentos salariales. Ofrecen primas por “seguridad” y “productividad” para comprarse nuestro silencio a costa de nuestra vida y salud. Estos son pagos manchados de sangre.

Los miembros del movimiento comunista tienen una tradición orgullosa de contribuir dichos sobornos al Fondo de Capital del Partido Socialista de los Trabajadores, el cual se usa para cubrir los gastos de proyectos editoriales a largo plazo.

Los directores del Militante felicitan a los miembros y partidarios del PST y de la Juventud Socialista que, sin titubar, están donando sus cheques del “estimulo económico” al Fondo de Capital del PST.

Instamos a todos los lectores a seguir este ejemplo de conciencia de clase y contribuir sus cheques a la prensa socialista.  
 
 
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