NUEVA YORK — “Sin justicia, ¡no hay pizza!” corearon 70 personas durante una protesta frente a una pizzería de Domino’s en Washington Heights el 4 de diciembre, para apoyar a 20 trabajadores que realizaron un paro de un día para denunciar el trato discriminatorio contra los que quieren organizar un sindicato. Cada vez que otro trabajador ponchaba su tarjeta para unirse a la protesta se escuchaba una ovación.
“Nos recortan las horas y los patrones muestran favoritismo hacia los que no apoyan la unión”, dijo a los presentes José Sánchez, uno de los dirigente de la lucha.
“Nos obligan a comprar nuestras bicicletas”, dijo al Militante Carmelo Polica, trabajador de entrega a domicilio. “Dicen que pagarán las reparaciones pero pocas veces lo hacen”.
— SARA LOBMAN