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Vol. 81/No. 21      29 de mayo de 2017

 

Respuesta del PST a negación de exención por comisión electoral

 
POR JOHN STUDER
El informe sobre la audiencia de la Comisión Electoral Federal en la que se negó al Partido Socialista de los Trabajadores la exención de reportar los nombres de personas que contribuyan más de 200 dólares a sus campañas ha provocado algunas preguntas que nos gustaría responder. El reportaje sobre la decisión fue publicado en inglés en el número del 8 de mayo.

El Partido Socialista de los Trabajadores ganó la exención de divulgar los nombres de contribuyentes a sus campañas electorales en los años 1970, cuando el partido libraba una lucha política —una lucha que incluyó un litigio en un tribunal federal contra el FBI y otras agencias de la policía— que puso en evidencia pruebas de operaciones de espionaje y desbaratamiento durante décadas por parte del gobierno contra el PST, sindicalistas, luchadores por los derechos de los negros, defensores del derecho al aborto y otros.

Como parte de esa batalla política, también ganamos una exención de las leyes federales de divulgación en las campañas electorales. El PST lo logró a pesar de una campaña de los gobernantes —apoyada por grupos liberales como Common Cause— para imponer una “reforma electoral” en nombre de la “transparencia”, con el fin de recobrar la confianza en la política capitalista a raíz de la creciente oposición a la Guerra de Vietnam y la exposición de las operaciones policiacas del gobierno, desde “Watergate” hasta los asesinatos e intentos de asesinato dentro y fuera del país.

De hecho, estas leyes de “reforma” electoral fueron un ataque contra los trabajadores, que impusieron obstáculos a la acción política independiente de la clase trabajadora.

Desde un principio, los gobernantes y su Comisión Federal Electoral (FEC) deseaban la llegada del día en el que pudieran deshacerse de la exención del Partido Socialista de los Trabajadores, la única que la FEC había otorgado. La consideraban una barrera para poder imponer su campaña anti obrera de “transparencia”.

El Partido Socialista de los Trabajadores se opone a todas estas leyes. Para conocer las posiciones del PST, todo lo que hay que hacer es leer su literatura, incluyendo la cobertura de su actividad y posiciones en el Militante. No es necesario saber que el señor Fulano de Tal dio 210 dólares para apoyar una campaña electoral del PST.

Más aun, uno de los problemas más grandes que enfrentan los trabajadores para romper con el sistema bipartidista de los patrones y tomar el indispensable camino de la acción política independiente de la clase obrera es el papeleo burocrático que le impone el gobierno. Los gobernantes son maestros del uso de subterfugios burocráticos para atacar, multar, e incluso encarcelar a sindicalistas y otros militantes obreros por presuntas “violaciones”.

La mayoría de los trabajadores que apoyan al PST y a sus campañas hoy quieren que la gente sepa que lo apoyan. Firman peticiones para que los nombres de sus candidatos aparezcan en la boleta electoral, se suscriben al Militante, y hablan con sus compañeros de trabajo y sus amigos sobre el PST.

Dado el desastre infligido a los trabajadores por los patrones y su gobierno, cada vez más trabajadores buscan una alternativa política a la política capitalista. Hoy en día hay oportunidades políticas sin precedentes para el PST.

Participaremos en elecciones agresivamente para presentar nuestros puntos de vista y ganar nuevos miembros. Pediremos a los trabajadores y a otras personas que contribuyan generosamente a nuestras campañas, para que podamos unirnos a las luchas alrededor del país y en todo el mundo y difundiremos el programa del partido lo más ampliamente posible.

La mayoría de las contribuciones a un partido de trabajadores como el PST están por debajo de 200 dólares, y no requieren divulgación según las regulaciones de la FEC. Pero si alguien quiere dar más de 200 dólares en un año —y damos la bienvenida a tales contribuciones— les informaremos y actuaremos de acuerdo a la ley cuando presentemos nuestros informes a la FEC.

Y el Partido Socialista de los Trabajadores seguirá ayudando a dirigir la lucha contra los ataques a los derechos políticos de los trabajadores —incluyendo los del PST— por parte de los patrones, la policía política de los gobernantes y matones derechistas.  
 
 
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