Militante/Martín Koppel

Ben O'Shaughnessy (centro), candidato del PST a vicegobernador de N.Y. en protesta contra ataque israelí.

POR MARTÍN KOPPEL  
NUEVA YORK, 18 de julio—“Nuestra campaña se une a otros que exigen que el gobierno israelí cese sus ataques asesinos contra Líbano y los palestinos en Gaza”, dijo Róger Calero, candidato a senador por el Partido Socialista de los Trabajadores en Nueva York. El y otros partidarios de la campaña socialista participaron hoy en un manifestación frente a la misión israelí a Naciones Unidas para condenar el bombardeo de Líbano y los ataques en Gaza.

Calero condenó el apoyo del gobierno norteamericano a la agresión de Tel Aviv. “También exigimos el cese de las amenazas dirigidas por Washington contra Irán y Siria, así como también el retiro de todas las tropas norteamericanas y demás fuerzas de ocupación de Iraq y Afganistán”, dijo, “no dentro de dos años o seis meses sino ¡ya!”. El gobierno estadounidense y los demócratas y republicanos, “los partidos capitalistas gemelos, están actuando en defensa de las ganancias de un puñado de familias multimillonarias que esos partidos representan”.

En contraste, los candidatos demócratas y republicanos del estado de Nueva York reiteraron su respaldo a las acciones del gobierno israelí. La senadora Hillary Clinton, la candidata demócrata, habló en una manifestación proguerra de “solidaridad con Israel” que se realizó frente a la ONU el 17 de julio. Abogó por “tomar cualquier medida necesaria” para defender el ataque de Tel Aviv contra Líbano y Gaza a fin de “enviar un mensaje a Hamas, a Hezbolá, a los sirios y a los iraníes”, calificándolos como “los nuevos totalitarios del siglo XXI”. Su contrincante republicana Kathleen McFarland dijo en rueda de prensa el 13 de julio que ella respaldaba el bombardeo a Líbano, afirmando que el gobierno israelí tiene derecho a defenderse, informó el New York Times.

Los partidarios de la campaña socialista han llevado su perspectiva obrera por toda la ciudad de Nueva York y a Albany, Buffalo y otras ciudades del estado mientras recogen firmas para poner los nombres de los candidatos del PST en la boleta electoral.

“Sí, voy a firmar. Estoy 100 por ciento de acuerdo en que las tropas ya deben salirse de allí. Mi hijo está en Bagdad. No deberían estar en Iraq”, dijo Sheila Powell, mientras ella y una amiga firmaban en una esquina en Harlem el 16 de julio.

Después de nueve días, los partidarios de la campaña socialista en el estado de Nueva York ya habían conseguido cerca de 16 mil firmas. Proyectan obtener 30 mil firmas, el doble de las requeridas, para aparecer en la boleta electoral como alternativa obrera frente a los demócratas, republicanos y demás partidos capitalistas.

El Partido Socialista de los Trabajadores está postulando a Róger Calero para senador y Maura DeLuca para gobernadora de Nueva York.

Al hacer campaña en Sunset Park, un barrio de Brooklyn con una numerosa población mexicana, Calero dijo al Militante que muchos de los trabajadores con quien conversó habían participado en las enormes marchas de los últimos meses para exigir la legalización de todos los inmigrantes indocumentados. “Les agradó saber que nuestra campaña aboga por la residencia permanente, inmediata e incondicional, para todos los indocumentados”, dijo.

Matilda Hernández, una estudiante de secundaria y miembro de la Juventud Socialista que participa a tiempo completo en el equipo que recoge firmas en Nueva York, dijo que mucha gente firmaba con gusto la petición luego de ver el cartel en la mesa del equipo que condenaba la invasión israelí de Líbano. Sin embargo, un individuo que se acercó a la mesa expresó su oposición al gobierno israelí pero también hizo un comentario antijudío. “Aclaramos que nuestra campaña se opone al odio contra los judíos, y el tipo se marchó”, dijo Hernández.

Mucha gente firmó a favor de los candidatos socialistas al ver que la plataforma electoral del PST respalda a los trabajadores que defienden su sindicato o que luchan por sindicalizarse frente a los ataques patronales.

“Tengo familiares que son transportistas en el sistema de subterráneos del MTA de Nueva York, y no me gustó como se trató al sindicato cuando salieron en huelga”, dijo Anthony Johnson, trabajador de un hospital en Harlem.

“Es bueno ver a candidatos que realmente están a favor de los sindicatos”.
 
 
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