Vol. 71/No. 14      9 de abril de 2007

Entre tanto, las tensiones entre Londres y Washington por un lado y Teherán por el otro, han aumentado tras el arresto el 23 de marzo de 15 marines británicos en el Golfo Arabe-Pérsico que la marina iraní dice fueron capturados en aguas iraníes.

El 23 de diciembre, el Consejo de Seguridad de la ONU había adoptado sanciones contra Irán por continuar su programa de enriquecimiento de uranio, un proceso necesario para crear combustible para reactores nucleares. De enriquecerse a un grado más alto, el combustible también puede emplearse para armamentos atómicos. El Consejo de Seguridad advirtió imponer más sanciones si Teherán no accede a su demanda de cesar el enriquecimiento de uranio.

Washington, con la reserva de armamento nuclear más grande del mundo, ha dirigido el ataque por una acción punitiva contra Irán, alegando que el enriquecimiento de uranio está dirigido a construir armar nucleares. Teherán insiste que su programa nuclear esta diseñado para el propósito pacifico del desarrollo económico y la infraestructura del país.

“Puedo asegurarles que la presión e intimidación no cambiarán la política de Irán”, dijo el ministro de relaciones exteriores Manouchehr Mottaki al Consejo de Seguridad luego de la votación del 24 de marzo. “La suspensión no es una opción ni una solución”.

En otro golpe contra Irán, el gobierno ruso ha retrocedido en su compromiso de completar la planta nuclear iraní Bushehr, a ser inaugurada este año.

El 23 de marzo, un día antes que el Consejo de Seguridad impusiera sus nuevas sanciones, las fuerzas armadas iraníes detuvieron a 15 miembros de la marina británica en el canal de Shatt al-Arab, cerca de la frontera sur entre Iraq e Irán.

Según Teherán, las tropas británicas habían entrado ilegalmente a territorio iraní. Londres contradijo diciendo que sus marines —quienes acababan de registrar a un barco mercante en el canal— estaban en territorio iraquí cuando fueron confrontados.

El primer ministro británico Tony Blair dijo que al gobierno iraní “no debe quedarle ni una duda en absoluto que tan seriamente consideramos este acto, que fue injustificado y equivocado”.

El 28 de marzo el ministro del exterior británico anunció que Londres suspenderá de todos los contactos oficiales con Teherán hasta que sean regresados los 15 soldados.

El día anterior la Armada estadounidense dio inicio a maniobras militares en el Golfo, utilizando dos grupos de buques de ataque. más de 100 aviones de guerra y 10 mil tropas. Es la muestra de fuerza más grande hecha en el Golfo desde la invasión de Iraq en 2003.
 
 
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