POR NAOMI CRAINE
LOS ANGELES, 16 de mayo Estoy aquí para que se escuche mi voz y que esto no ocurra con impunidad, dijo Josefina González en un foro público organizado el 14 de mayo por el consejo municipal de Los Angeles. González fue una de los muchos trabajadores aporreados por la policía en el acto del Primero de Mayo en el parque MacArthur, donde se juntaron 5 mil personas para exigir la legalización de los inmigrantes indocumentados y el cese de las redadas y deportaciones.
Muchos de los grupos que organizaron la marcha del Primero de Mayo convocaron a una manifestación el 17 de mayo a fin de exigir cárcel y castigo para los policías que asaltaron a decenas de personas y reivindicar la legalización de los indocumentados. Esta será la primera protesta callejera desde el 1 de Mayo. Otros grupos proyectan una manifestación el 24 de junio en Hollywood.
La Coalición 25 de Marzo, que auspició la marcha de 30 mil personas que precedió el mitin del Parque MacArthur el 1 de mayo, anunció hoy su apoyo a la protesta del 17 de mayo.
Los policías dispararon 240 balas de goma y golpearon a la gente con macanas para expulsar a todos del parque, unas horas antes de que venciera el permiso para celebrar el acto. Entre los lastimados hubo unos cuantos periodistas, uno de los cuales ha entablado un pleito judicial contra la ciudad y el departamento de policía (LAPD).
El motín policiaco contra una manifestación pacífica, compuesta mayormente de trabajadores y sus hijos, se ha convertido en un tema importante de debate en la política de la ciudad. Los concejales están proyectando otros cuatro foros públicos; el próximo será el 30 de mayo.
En el foro, el jefe de policía William Bratton dijo que hay tres investigaciones de lo que pasó el Primero de Mayo y que los agentes responsables ese día han sido reemplazados.
Mucha gente que habló en el foro dijo que las medidas que ha tomado el LAPD son insuficientes y que Bratton debe dimitir.
Simplemente con cambiar de puestos no se cambia nada, porque todavía les están pagando los mismos salarios, dijo Pedro Reyes, quien también fue golpeado por la policía. Esto no es castigo. No es justicia.
Estoy listo para el 17 de mayo, dijo el trabajador Héctor Gómez. Estoy listo para una marcha, una huelga, lo que sea. El fue golpeado en el tobillo por un policía el 1 de mayo y aún no había visto un médico. Esperé muchas horas en el hospital y al final me fui. Después fui a una clínica, pero pedían 30 dólares y solo tenía 20 dólares, así que nunca vi al médico.
Una acción como esta es la mejor forma de responder a la brutalidad e intimidación de la policía, dijo Chris Remple, quien acaba de lanzar su campaña como candidato del Partido Socialista de los Trabajadores en unas elecciones especiales para el Congreso en el Distrito 37. Regresemos a las calles para afirmar, como dice el volante, que no van a callar nuestras voces.
El motín policiaco ha ampliado la discusión entre trabajadores nacidos en Estados Unidos, incluidos los afroamericanos.
No hubo justificación, dijo Tracy Ross, quien trabaja en una escuela pública. Dicen que tenemos libertad de expresión, libertad de asamblea. Eso debería ser para todos.
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