Vol. 73/No. 7 23 de febrero de 2009
A la vez que arriesgan nuestras vidas y nuestros cuerpos, ellos y su gobierno intentan sobornarnos con bonos dinero manchado en sangre cuyo propósito es lograr que los trabajadores no se quejen y no luchen por salarios más altos, condiciones de trabajo seguras, y completa cobertura médica para todos los trabajadores.
Reportamos en la página 10 que tres trabajadores comunistas en San Francisco comenzaron el año nuevo enviando estos sobornos al Fondo de Capital del movimiento. No era mucho dinero $32 en total. Sus contribuciones demuestran que estos sobornos no tienen nada que ver con dinero. Todos estos regalos de los patrones, sean grandes o pequeños, que están fuera del acuerdo salarial, se dan a expensas de nuestra sangre y la de nuestros compañeros de trabajo. Están diseñados para atar a los trabajadores a la compañía y alejarnos de cualquier curso de acción que indique la necesidad de poner fin al sistema salarial.
Es un proyecto continuo de los patrones día tras día de usar el palo y la zanahoria mientras aceleran la producción y amenazan la vida y el cuerpo en aras de las ganancias.
En el caso de estos tres trabajadores socialistas, los bonos no estaban ligados directamente a una lucha en el trabajo o a un chantaje por parte de los patrones para que los trabajadores aprobaran concesiones en un contrato; esto sucede frecuentemente con los sobornos. Muchas veces los entregan en los días festivos con el intento de convencer a los trabajadores que nosotros tenemos un interés en común con nuestra compañía, nuestra industria y en el caso de los paquetes de estímulo económico del gobierno, con nuestro país.
Los miembros del movimiento comunista tienen la tradición honorable de actuar en contra de los patrones contribuyendo el dinero manchado en sangre al Fondo de Capital. Discuten esos sobornos con sus compañeros de trabajo inmediatamente y los instan con su ejemplo a hacer los mismo. Estas contribuciones avanzan el programa de publicación de largo plazo para producir las armas políticas que los trabajadores necesitan para quitar el poder político de manos de las familias multimillonarias y comenzar a organizar la sociedad para satisfacer las necesidades de millones de trabajadores en el mundo entero.
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