Vol. 73/No. 49      21 de diciembre de 2009

Conocidos internacionalmente como los Cinco Cubanos, los prisioneros han estado encarcelados por cargos falsos desde su detención en 1998. Ellos estaban trabajando en Estados Unidos para monitorear a grupos contrarrevolucionarios con un historial de llevar a cabo ataques armados contra Cuba, realizados con la complicidad de Washington.

La decisión de los tribunales de reducir las sentencias representa una importante victoria que puede usarse para seguir avanzando. Esta concesión por parte del gobierno de Estados Unidos se debe al creciente apoyo que el caso de los cinco ha logrado internacionalmente, el cual los fiscales reconocieron por primera vez durante la resentencia de Antonio Guerrero en octubre. Con este importante acontecimiento en el frente legal, los partidarios de los Cinco Cubanos están en una mejor posición ahora para ganar un apoyo más amplio entre el pueblo trabajador por todo el mundo para lograr la libertad de los cinco.

Gerardo Hernández, encarcelado con acusaciones que incluyen “conspiración para cometer asesinato” y “conspiración para cometer espionaje”, todavía enfrenta dos cadenas perpetuas más 15 años de prisión. Las reducciones en las sentencias conseguidas hasta el momento también ponen a los partidarios de los cinco en una posición más firme para luchar el escandalosamente grave castigo contra Hernández.

El pueblo trabajador y los partidarios de los derechos democráticos de todas partes, especialmente en Estados Unidos, están afectados directamente por esta lucha. En cada etapa, su caso ha estado caracterizado por violaciones flagrantes contra los derechos de los trabajadores, incluyendo registros por parte del FBI sin permiso judicial, el uso de “evidencia” secreta, espionaje e intervención de teléfonos, uso de cargos de “conspiración” y el rechazo a cambiar el lugar del juicio, a pesar del medio hostil donde es imposible la mínima semblanza de un juicio justo.

Los gobernantes estadounidenses han incrementado los ataques contra los derechos democráticos y las libertades civiles, a medida que se preparan para las batallas contra el pueblo trabajador que emergerán de la profundización de la crisis capitalista.

El caso es puramente político. Washington no está acosando a los cinco por el resultado de sus acciones en Estados Unidos. El gobierno estadounidense ha admitido incluso que sus acciones no representaban un compromiso a la “seguridad nacional”.

Están siendo castigados por tener el orgullo de ser soldados de la Revolución Cubana, donde el pueblo trabajador ha tomado el poder político, trasformado la sociedad para beneficio de la mayoría trabajadora y ha defendido sus conquistas frente a la agresión del imperialismo norteamericano durante más de cinco décadas.

Tomemos esta victoria que hemos logrado y usemos este impulso para extender los logros. ¡Construyamos la campaña por la libertad de los Cinco Cubanos, ya!
 
 
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