Vol. 73/No. 50      28 de diciembre de 2009

La MTA dice que enfrenta un “repentino déficit financiero de más de 400 millones de dólares”, según el New York Times. Aprobó unánimemente el 16 de diciembre planes para eliminar gradualmente las tarjetas de MetroCard que reciben unos 550 mil estudiantes a precio reducido o gratuitamente; reducir o eliminar el servicio en docenas de rutas de autobús; cerrar dos líneas de trenes subterráneos y reducir dos otras, y operar menos trenes al mediodía y en la noche. El programa para discapacitados Access-a-Ride será reducido. El plan eliminaría 700 puestos de empleo y rebajaría en un 10 por ciento los salarios de trabajadores no sindicalizados.

El New York Post publicó un editorial el 15 de diciembre con el encabezado “Sacrificándonos por los sindicatos” al momento que los medios capitalistas buscan culpar a los trabajadores de transito por los recortes.

El 11 de diciembre un juez de la Corte Suprema del estado de Nueva York falló que la decisión de arbitraje que les otorga a los trabajadores de tránsito un pequeño aumento salarial promedio de 3.7 por ciento en cada uno de los próximos tres años, debe ser implementada. El sindicato de trabajadores de transporte público TWU habían acordado someterse a un arbitraje con la MTA después que expirara su contrato en enero de 2008. La MTA rehusó implementar la decisión del arbitraje, pero la corte ahora la ha reafirmado.

Alegando que el estado enfrenta un déficit de 3.2 mil millones de dólares en el presupuesto de este año, Patterson exigió que la legislatura estatal recortara esa cantidad de las asignaciones presupuestarias ya aprobadas, incluyendo más de mil millones de dólares para la educación y servicios de salud. En respuesta, la legislatura recortó 2.7 mil millones de dólares de los programas sociales a principios de este mes. Esto incluye la eliminación de 140 millones de dólares de la MTA, un recorte de 58 millones de dólares a universidades de la ciudad, y la reducción a las pensiones para muchos trabajadores estatales nuevos.

Pero al ver que los legisladores no recortaron tanto como él quiso, Patterson de forma unilateral impuso otros 750 millones de dólares en recortes.

Mientras los políticos capitalistas intensifican su campaña para cortar programas y servicios sociales, dan alta prioridad a pagar a los acaudalados obligacionistas de la deuda estatal. Este año estos pagos suman 5.9 mil millones de dólares en el estado de Nueva York, un aumento de casi 50 por ciento desde hace una década.
 
 
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