Vol. 76/No. 35      1 de octubre de 2012

Aoki, un japonés americano, fue un dirigente prominente del Partido de las Panteras Negras y de la huelga del Frente de Liberación del Tercer Mundo que tuvo lugar en Berkeley, California, en los años 60. Antes de unirse a esos grupos, Aoki había sido miembro de la Alianza de la Juventud Socialista y del Partido Socialista de los Trabajadores. Subsecuentemente, Aoki se hizo educador y consejero en colegios del área de la Bahía y continuó su activismo político.

Las acusaciones de Rosenfeld provienen de discusiones que tuvo con un fallecido agente del FBI, Burney Threadgill, quien le dijo a Rosenfeld que él entrenó a Aoki como espía; del testimonio de Wesley Swearingen, un agente del FBI jubilado que dice que Aoki le da la impresión de alguien que el FBI utilizaría como informante; y de un documento sobre Aoki lleno de tachones que Rosenfeld obtuvo del FBI.

Esta acusación de espía generada por el FBI sigue una vieja tradición utilizada por las agencias policíacas del gobierno para dividir y desbaratar a organizaciones políticas provocando una caza de brujas interna, que conduce a que se acusen de soplones a algunos miembros, a luchas internas, expulsiones y la violencia física.

Aoki, quien falleció en 2009, negó la acusación cuando Rosenfeld lo confrontó en una entrevista en 2007. Varias personas han expresado públicamente su rechazo al método de Rosenfeld de utilizar fuentes del FBI para calumniar a Aoki.

Diane Fujino, quien escribió una biografía de Aoki, Samurai Among Panthers: Richard Aoki on Race, Resistance, and a Paradoxical Life, [Samurai entre panteras: Richard Aoki habla sobre raza, resistencia y una vida paradójica] debatió a Rosenfeld el 23 de agosto en el programa Democracy Now de la Radio Pública Nacional.

Ex miembros del Partido de las Panteras Negras, incluyendo a Bobby Seale, Emory Douglas, Elbert “Big Man” Howard, y otro de los pocos miembros asiáticos del partido, Lee Lew Lee, también lo han defendido públicamente.

“Debemos recordar que en ese entonces la gente era acusada de soplón con frecuencia”, escribió Lee, añadiendo, “la gente debe acordarse de confirmar la FUENTE”.

Pero las fuentes del FBI que Rosenfeld emplea fueron aparentemente suficientes para que grupos liberales y radicales se unieran al coro de acusaciones.

Mother Jones publicó un artículo el 21 de agosto del director Dave Gilson titulado “El ‘Gato Radical Japonés’ que espió contra las panteras para el FBI”.

El 29 de agosto la SocialistWorker.org, la publicación en Internet de la Organización Socialista Internacional publicó un artículo del autor Bill Mullen que dice que “examina los explosivos alegatos en un nuevo libro de Seth Rosenfeld de que el antiguo miembro del Partido de las Panteras Negras Richard Aoki podría haber sido un espía del FBI”. El artículo declaró que “los activistas y revolucionarios deben tomar en serio [los alegatos]” y especula sobre los daños de los cuales Aoki podía ser responsable “si [los alegatos] son ciertos”.

Dos semanas después, el 8 de septiembre, el Chronicle publicó un segundo artículo de Rosenfeld en el que dice que el FBI acababa de entregarle 221 páginas adicionales sobre Aoki. El contenido de los archivos está casi completamente tachado, dice Rosenfeld, pero el hecho de que tienen el nombre de Aoki y declaraciones de agentes del FBI de que contienen reportes de soplones significa que las páginas “confirman” que era un espía.

Al día siguiente, más de 200 personas asistieron al evento “Richard Aoki, pantera negra y activista asiático americano: ataques de Cointelpro y reclamando el legado” en el Centro Cultural EastSide en Oakland, California. Los oradores principales incluyeron a Diane Fujino y ex miembros del Partido de las Panteras Negras Emory Douglas, Tarika Lewis y Bobby Seale.

El mitin fue organizado para responder a las acusaciones de Rosenfeld, reportó el Oakland Local el 11 de septiembre, señalando que la justificación de Rosenfeld son “el testimonio de un agente gubernamental muerto y una pila de documentos declasificados”.

“Cada vez que una oración empieza con la frase ‘el FBI dice’, uno debe cuestionarla”, dijo Greg Morozumi de la Alianza de Artes del East Side.

“El Partido Socialista de los Trabajadores se pone al lado de los que no le prestan ninguna credibilidad a las acusaciones y ‘las pruebas’ provenientes del FBI”, decía una declaración del partido que fue distribuida a los participantes en el mitin. “Nos unimos a los que se oponen a la campaña encabezada por Rosenfeld”.

Willie Cotton contribuyó a este artículo.
 
 
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