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Vol. 80/No. 3      25 de enero de 2016

 
(portada, editorial)

¡Libertad para los Hammond, ganaderos de Oregon!


Los trabajadores deben apoyar la demanda por la excarcelación inmediata de los ganaderos Dwight y Steven Hammond, quienes han sido enviados de nuevo a una prisión federal después de haber servido sus penas por incendios provocados por ellos para proteger sus tierras. Estos temas que se han puesto de manifiesto en Harney County, Oregon, desde principios del año son importantes para los trabajadores y agricultores de todo el país.

Las sentencias extendidas por cinco años contra los Hammonds se impusieron bajo la Ley de Antiterrorismo y Pena de Muerte Eficaz aprobada en 1996, que fue parte de la proliferación de sentencias mínimas obligatorias que han resultado en cifras galopantes de encarcelamiento en Estados Unidos. Muchos trabajadores están familiarizados con la manera que se usan estas leyes para coaccionar a la gente a que acepten una “negociación de sentencias” y castigar a quienes insistan en su derecho a un juicio con jurado.

Los que califican a los personas que están ocupando la Reserva Natural Malheur de “terroristas domésticos” están preparando el terreno para que agentes federales usen su fuerza militar en su contra. No debemos olvidar el ataque asesino del FBI contra los miembros de la secta religiosa Branch Davidians en Waco, Texas, que resultó en la muerte de 86 hombres, mujeres y niños en 1993.

“Este horrendo crimen expone la verdadera faz del gobierno imperialista bipartidista en Estados Unidos: su presidencia imperial, el congreso, las fuerzas armadas, la policía y las cortes”, decía una declaración emitida por el Comité Nacional del Partido Socialista de los Trabajadores.

El encarcelamiento de los Hammonds tienen lugar en el contexto de una creciente contracción económica que afecta de manera particularmente dura a los trabajadores y pequeños agricultores.

Los rancheros y agricultores se ven afectados de manera creciente por la explosión en la burocracia gubernamental que ha hecho mucho más difícil que ganen lo necesario para sobrevivir —especialmente los que trabajan la tierra por si mismos. Las grandes empresas capitalistas hallan maneras para que el sistema funcione para ellos.

El estado capitalista ha estado creciendo desde la Segunda Guerra Mundial. El gobierno de Barack Obama ha sido notable en cuanto a la expansión de los reglamentos federales. En muchos estados del oeste del país, donde la mayoría de la tierra está bajo la jurisdicción del gobierno, esto lleva a riñas por el acceso a áreas de pastoreo, agua y otras necesidades de los rancheros y agricultores.

Las concurridas asambleas en Burns han dejado claro que existe un amplio apoyo a la demanda por la libertad de los Hammonds y a demandas contra las restricciones del gobierno que paralizan a los que trabajan la tierra.

El objetivo del Partido Socialista de los Trabajadores es el de “educar y organizar a la clase trabajadora a fin de establecer un gobierno de trabajadores y agricultores, que abolirá el capitalismo en Estados Unidos y se unirá a la lucha mundial por el socialismo”. Esto hace hincapié en la alianza necesaria entre trabajadores y agricultores para poner fin a la dictadura del capital.

La Revolución Cubana sentó un ejemplo. Después de tomar el poder en 1959, los trabajadores y agricultores llevaron a cabo una reforma agraria de mucho alcance. En Cuba la tierra no puede venderse, y su uso está garantizado para quienes la trabajen.  
 
 
 
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