(artículo principal)
Ucranianos responden a
provocaciones de Moscú
Mineros refutan prensa rusa, EEUU
Euromaiden |
Arriba, 10 mil marchan en Odessa, Ucrania, marzo 30, con una bandera ucraniana de 750 metros para celebrar la unidad de Ucrania. Derecha, mujer en protesta en Crimea el 8 de marzo. Letrero dice: “Putin, soy rusa. No necesito que me salves. Saca tus tropas de Crimea”.
|
POR JOHN STUDER
Pequeñas bandas armadas, que contaban con el apoyo del gobierno ruso, irrumpieron en edificios gubernamentales en las ciudades ucranianas de Donetsk, Lugansk y Kharkiv el 6 de abril, y en la ciudad de Mykolayiv el día siguiente, como parte de provocaciones diseñadas a preparar el terreno para una posible intervención rusa.
Aproximadamente uno 100 agentes partidarios de Moscú ocuparon el edificio del gobierno regional en Donetsk, cerca de la frontera oriental de Ucrania. Declararon la “República Popular de Donetsk” y anunciaron que organizarían un referéndum el 11 de mayo para decidir si desean separarse de Ucrania. Le pidieron al presidente ruso Vladimir Putin que enviara tropas, de las cuales cerca de 40 mil se encuentran actualmente concentradas cerca de la frontera.
Una cantidad similar de personas ocuparon la oficina local del Servicio de Seguridad de Ucrania en Lugansk, donde abrieron una armería y tomaron los fusiles AK-47.
Un grupo de agentes pro-Moscú también ocuparon la oficina del Servicio de Seguridad de Ucrania en la ciudad de Kharkiv, al noreste del país, pero fueron repelidos dos días después por unidades elite ucranianas que arrestaron a 70 de ellos.
“La policía no estaba haciendo absolutamente nada, nomás andaban caminando entre los matones”, dijo al Kyiv Post Zinoviy Flionts, quien fue testigo de los eventos en Kharkiv. “Los hombres que se tomaron el edificio de gobierno eran rusos o simplemente criminales que fueron traídos de alguna parte”.
La noche del 7 de abril, fuerzas similares intentaron tomar la sede de gobierno en la sureña ciudad de Mykolayiv, pero fueron repelidos por voluntarios de unidades de autodefensa locales.
Aunque el este de Ucrania tiene fuertes lazos culturales con Rusia, la mayoría de los trabajadores de la región se oponen a las provocaciones anexionistas de Moscú, explicaron al Militante mineros de Krivii Rig, refutando la impresión que da gran parte de la cobertura de la prensa burguesa, desde Rusia a Estados Unidos. Los mineros dijeron que están preparados para defender la soberanía ucraniana, lo que para ellos representa una extensión necesaria de la defensa de sus intereses como trabajadores contra los patrones en Ucrania.
“Hay diferencias entre el este y el oeste de Ucrania”, dijo al Militante Samoilov Juriy Petrovych, dirigente del Sindicato Independiente de Mineros de Krivii Rig, en la oficina del sindicato el 26 de marzo. Krivii Rig es un centro minero de mineral de hierro a unas 85 millas al sudoeste de Dnipropetrovsk en el este de Ucrania. “Por ejemplo, hay unos 200 periódicos en esta región, pero solo 10 o 15 están en ucraniano. Los demás están repletos de propaganda del gobierno ruso que dice que los manifestantes de la Maidan en Kiev son fascistas y alegan que son una amenaza para las personas de habla rusa en el este.”
“Aquí en el este tenemos lazos más cercanos con Rusia”, dijo. “Muchos de nosotros tenemos parientes en Rusia y hemos considerado durante mucho tiempo a los rusos como nuestros hermanos. Pero hoy en día el gobierno ruso está amenazando con invadir a Ucrania, y la mayoría de los trabajadores aquí están de acuerdo de que haremos todo lo posible para defender a nuestro país”.
“Estamos organizando a los trabajadores en unidades de autodefensa para prepararnos lo mejor que podamos”, dijo Bondar Vitalievych, otro dirigente sindical. “Empezamos hace un par de meses para que los trabajadores se pudieran defender de las bandas de matones organizadas por los patrones de las minas”.
“Emitimos un comunicado que dice que necesitamos organizarnos para detener las manifestaciones separatistas en Ucrania”, dijo Vitalievych. “Aparecieron matones pro-Moscú, incluyendo algunos francotiradores armados, para enfrentar nuestra manifestación de la Maidan aquí el 24 de febrero, pero cientos de trabajadores organizados en nuestras unidades de autodefensa les impidieron matar a nadie”.
“Emitimos un volante que hace un llamamiento a los trabajadores para ir a la reunión del consejo municipal el próximo día para exigir que el gobierno local actúe conforme a la voluntad del pueblo o a que dimita”, dijo Vitalievych, mientras señalaba una foto en la pared en la que se ve a cientos de mineros y a otros votando en la reunión. Los miembros del consejo municipal, dijo, eran partidarios del ex presidente Victor Yanukovych, quien era pro-Moscú y había huido del país tres días antes.
Los mineros organizaron una visita a la mina de mineral de hierro EZRAM para los corresponsales del Militante. La mina está a cargo de capitalistas rusos que son dueños de minas de mineral de hierro y de carbón, plantas de tratamiento y acerías en Ucrania, Rusia, Canadá, Sudáfrica y Estados Unidos.
“Esta mina es sumamente peligrosa”, dijo Vitalievych. “Hace dos años tuvimos 23 ‘accidentes’ y el gobierno se vio presionado a venir a realizar algunas inspecciones”.
“Nuestro sindicato lucha por condiciones de trabajo más seguras, así como para asegurar que la compañía y el gobierno proporcionen asistencia médica y pensiones cuando uno termina de trabajar”, dijo.
Los mineros en Estados Unidos enfrentan ataques similares, dijo el corresponsal del Militante Frank Forrestal, un ex minero de carbón en el oeste de Pennsylvania, a los mineros ucranianos. “Los patrones del carbón han cerrado minas menos rentables, y las condiciones de trabajo han empeorado mientras los patrones recortan los gastos para mantener sus ganancias”.
“Cuanto más hablamos”, dijo Elena Maslova, una veterana de 15 años en la mina y directora del local para la igualdad entre hombres y mujeres, “más me acuerdo de algo que solíamos pensar: la necesidad de que los proletarios de todo el mundo se unan”.
|