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POR SETH GALINSKY
Más de 220 mil miembros del Sindicato Nacional de Trabajadores Metalúrgicos de Sudáfrica (NUMSA) dejaron sus puestos de trabajo en todo el país el 1 de julio, inspirados por la exitosa huelga de cinco meses de mineros del platino que finalizó una semana antes. Los obreros del metal iniciaron su lucha con manifestaciones en Ciudad del Cabo, George, Durban, Puerto Elizabeth, Kwazulu-Natal, East London y Johannesburgo. El corazón de las huelgas está en las fábricas que producen componentes para las minas, automóviles y equipos de telecomunicaciones. Los huelguistas exigen un aumento salarial del 12 por ciento. Los patrones solo ofrece un 10 por ciento para los trabajadores con salarios más bajos y entre 7 y 8 por ciento para el resto. El punto central es la demanda sindical de poner fin al sistema de contratistas laborales y por un contrato de un año. “Si trabajas permanentemente, tienes beneficios, salarios, asistencia médica y todo eso, pero si te emplea un contratista no es lo mismo”, dijo Mphumzi Maqungo, tesorero nacional del sindicato de trabajadores metalúrgicos, al Militante por teléfono el 4 de julio. “El trabajador empleado por el contratista dice: ‘Estamos en la misma línea, el mismo turno, el mismo trabajo, ¿por qué no puedo tener los mismos beneficios?’” Los patrones quieren un contrato de tres años. “Pero los comestibles suben de precio, todo sube de precio”, dijo. “Nuestra estrategia es que queremos una negociación colectiva para los trabajadores en automóviles, neumáticos y repuestos”. El sindicato también exige que los patrones no implementen un subsidio salarial juvenil aprobado por el Congreso Nacional Africano, que da a los patrones un incentivo para echar a los trabajadores de más edad y es una nueva herramienta para sembrar divisiones. La medida “reembolsa” a las compañías parte de los salarios de los trabajadores nuevos entre 18 y 29 años de edad. En un comunicado de prensa del 4 de julio, la Federación de Industrias del Acero e Ingeniería de África del Sur dijo que “de ninguna manera” los patrones de la industria “iban a aceptar la demanda del NUMSA de dejar de utilizar para siempre los servicios de contratistas laborales”. ‘Luchan por próxima generación’ Los mineros en Anglo American Platinum, Impala y Lonmin, los tres principales productores mundiales de platino, volvieron al trabajo el 25 de junio. Los mineros, organizados por la Asociación de Mineros y Sindicato de la Construcción (AMCU), habían estado en huelga desde el 23 de enero. En una asamblea de masas en el estadio de fútbol de Rustenburg, los mineros aprobaron un contrato de tres años que incluye un aumento salarial anual del 20 por ciento, que significa unos mil rands (93 dólares) mensuales cada año para los trabajadores con salarios más bajos. Aquellos con salarios más altos obtendrán hasta un aumento del 8 por ciento.El mayor logro fue cerrar la brecha entre los trabajadores peor y mejor pagados, dijo al Militante el presidente de AMCU Joseph Mathunjwa. “Esta brecha de desigualdad todavía está allí, pero hemos podido reducirla”. El 4 de julio, tres días después de que comenzara la huelga de los trabajadores del metal, unos 2 mil miembros del Sindicato Nacional de Mineros salieron en huelga en la mina de platino Marula de Impala, exigiendo las mismas concesiones conquistadas por sus compañeros mineros del platino organizados por AMCU.
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