¡El Militante envía saludos por los días festivos a los trabajadores tras las rejas! Seguiremos divulgando la verdad sobre las condiciones que ustedes enfrentan y continuaremos luchando para garantizar que puedan recibir nuestro periódico y noticias sobre las luchas de los trabajadores por todo el mundo.
Los gobernantes capitalistas norteamericanos mantienen la mayor proporción de personas presas en comparación con cualquier otro país del mundo. El sistema de “justicia” mantiene a 2.3 millones de personas en una amplia variedad de prisiones estatales y federales y cárceles locales; otros 4.5 millones están bajo libertad condicional.
La fianza, la declaración de culpabilidad negociada, los tribunales, el confinamiento solitario, la policía y el sistema penitenciario —especialmente el uso salvaje de la pena de muerte— tienen como fin desmoralizar a los trabajadores y servir de advertencia a millones de ellos a que se sometan a las demandas de los patrones y su gobierno. Y el 33 por ciento de los que están encarcelados son negros, a pesar de que los africano americanos son solo el 12 por ciento de la población del país.
En un día cualquiera, casi 600 mil personas se encuentran en cárceles locales en todo el país. Aproximadamente dos tercios de ellos están a la espera de un juicio porque no pueden pagar la fianza. Usando la pandemia como excusa, muchas autoridades judiciales han suspendido indefinidamente los grandes jurados y los juicios. A pesar del derecho constitucional a un juicio rápido y a ser considerado inocente hasta que se pruebe su culpabilidad, los acusados simplemente son mantenidos en la cárcel.
Más del 10 por ciento de los encarcelados en Estados Unidos tienen 55 años de edad o más. Se encuentran entre los que tienen mayor riesgo de contraer coronavirus. Sin embargo, las autoridades gubernamentales dicen que los guardias penitenciarios tendrán prioridad para recibir la nueva vacuna, ¡mientras que los prisioneros estarán al final de la lista! Qué ilustración más gráfica de la bancarrota del sistema capitalista.
Celebramos la excarcelación bajo libertad condicional a principios de este año del ex Pantera Negra Jalil Muntaqim, de 69 años, después de casi 50 años en prisión. Y de Red Fawn Fallis, una indígena Oglala Sioux incriminada por su participación en protestas contra el oleoducto Dakota Access. Fue transferida a un centro de transición en septiembre.
Exigimos la liberación de todos los Panteras Negras encarcelados que quedan, entre ellos Edward Poindexter de Nebraska, el activista nativo americano Leonard Peltier y Mumia Abu-Jamal.
Nos unimos a la demanda por la liberación de los presos políticos y los de la guerra de clases en todo el mundo, incluidos los miles de encarcelados por el brutal régimen de Alexander Lukashenko en Belarús y el creciente número de dirigentes de la lucha por los derechos democráticos en Hong Kong.
Durante el último año, el Militante se ha opuesto exitosamente a los intentos de las autoridades penitenciarias de Florida e Indiana de bloquear el periódico. Estos atentados han fracasado y han despertado más interés en el periódico y en el camino de la clase trabajadora que el Militante promueve, para que el pueblo trabajador tome el poder político en nuestras propias manos.
Instamos a los trabajadores tras las rejas a suscribirse al Militante y a leer los libros de dirigentes del Partido Socialista de los Trabajadores y de otros revolucionarios publicados por la editorial Pathfinder. Solicitamos a nuestros lectores a que contribuyan al fondo de presos del Militante, el cual nos permite ofrecer suscripciones gratuitas o a precio reducido a los reos.