Este año se celebra el 60 aniversario de los Viajes por la Libertad, uno de los puntos álgidos de la lucha proletaria por los derechos civiles liderada por los negros que derrocó la segregación racial de Jim Crow y cambió de forma decisiva las relaciones sociales en Estados Unidos.
A pesar de los fallos de la Corte Suprema de Estados Unidos en 1946 y en 1960 que prohibían la segregación racial en los autobuses públicos interestatales, las autoridades en los estados bajo el Jim Crow en el sur hacían caso omiso de estas sentencias. Por lo tanto, los luchadores por los derechos civiles lanzaron los Viajes por la Libertad para implementarla por si mismos. Convocados por el Congreso por la Igualdad Racial, los voluntarios partieron desde Washington en autobuses de Greyhound y Trailways el 4 de mayo de 1961, rumbo a Nueva Orleans con el propósito de romper la segregación de las estaciones de autobuses a lo largo del recorrido.
Fueron recibidos por la violencia de la policía y del Ku Klux Klan. En Rock Hill, Carolina del Sur, los segregacionistas golpearon a los pasajeros negros cuando intentaron usar un baño designado “solo para blancos”. En Anniston, Alabama, una turba de supremacistas blancos detuvo el autobús de la Greyhound el 14 de mayo, arrojaron piedras y ladrillos, rompieron ventanas con tuberías y hachas y arrojaron una bomba incendiaria dentro del autobús. La turba intentó, sin éxito, impedir que los Viajeros por la Libertad se bajaran del autobús en llamas.
Horas más tarde Viajeros por la Libertad en un autobús de Trailways fueron brutalmente golpeados cuando ingresaron a una sala de espera y restaurante solo para blancos en la terminal de Birmingham, Alabama, después de que el notorio sheriff Bull Conner retiró a sus agentes de la escena. Fueron rescatados por el reverendo Fred Shuttlesworth, quien dirigió a una fuerza de luchadores por los derechos civiles para liberarlos.
El liberal New York Times culpó a los Viajeros por la Libertad por haber sido golpeados, diciendo que sus viajes eran un “acto provocador”. La administración de John F. Kennedy intentó convencerlos por todos los medios a que abandonaran su lucha.
En respuesta, cientos de voluntarios más, incluidos activistas del Comité Coordinador Estudiantil No Violento, se inscribieron para sumarse a los Viajes por la Libertad.
Pero enfrentaban un problema. Mientras se preparaban para salir de la Universidad Fisk en Nashville, Tennessee, rumbo a Jackson, Mississippi, todos los conductores de Trailways rehusaron hacer el viaje. Entonces, Jimmy Allen Ruth, un conductor caucásico de 23 años de Tennessee, se ofreció como voluntario. Ruth falleció el mes pasado a los 83 años.
“Ruth estaba dispuesto a ayudar en la causa de la libertad y la justicia a toda costa”, escribieron sus familiares en su obituario. Lo consideraba “uno de sus mayores logros”.
“Si iban a morir, yo moriré con ellos”, les dijo Ruth. “Accedió a llevar a los estudiantes y nunca preguntó nada, aunque estaba consciente de los riesgos involucrados”, dijeron en un comunicado de prensa su hermano Bobby Ruth y su amigo Blondell Strong Kimbrough.
Crecen los Viajes por la Libertad
Decenas de jóvenes de todo el país respondieron al llamado para resumir los Viajes por la Libertad. Uno de ellos fue Ken Shilman, de 18 años de edad y su mejor amigo, Joseph McDonald, ambos recién graduados de la escuela secundaria Oceanside en Long Island, Nueva York. Fueron a Montgomery, Alabama, y se subieron a uno de los autobuses.
Cuando los autobuses de los Viajeros por la Libertad llegaron a Jackson, la policía los arrestó acusándolos de violar un estatuto recién aprobado de violación de la paz. Fueron condenados, recibieron una multa de 200 dólares cada uno y, cuando se negaron a pagar, condenados a 90 días de cárcel. Durante el verano, más de 300 mujeres y hombres fueron arrestados, y muchos de ellos encarcelados en la notoria penitenciaría estatal de Mississippi en Parchman Parish, donde los carceleros intentaron humillarlos y acosarlos.
Shilman fue uno de los primeros arrestados el 2 de junio. Él y McDonald fueron escoltados por las autoridades fuera de la “sala de espera de color” en la estación de Trailways. Estuvieron presos por tres semanas en Parchman. Luego los Viajeros por la Libertad decidieron que algunos de sus presos deberían salir e irse a casa para correr la voz sobre las condiciones en la prisión.
Shilman y McDonald fueron dos de los elegidos. En Oceanside lograron obtener una entrevista con la Prensa Asociada el 21 de junio, y divulgaron las condiciones “indescriptibles” que enfrentaban los prisioneros. Prensa Asociada publicó la descripción de Shilman sobre dos compañeros de los Viajeros de la Libertad, “arrastrados desnudos a lo largo de 60 yardas de un corredor de concreto después de que se negaron a desnudarse y entrar a sus celdas”.
Shilman se unió a la Alianza de la Juventud Socialista y fue miembro del Comité Nacional y dirigente del Partido Socialista de los Trabajadores y su trabajo en los sindicatos. Falleció en 1989.
Desde el boicot de autobuses de Montgomery en 1956 y los Viajes por la Libertad, hasta la batalla de Birmingham en 1963 dirigida por Shuttlesworth, y la lucha por el derecho al voto en Selma y Montgomery, Alabama en 1965, esta histórica lucha social continuó, y cambiaron para siempre las posibilidades para la unidad obrera y la lucha de clases en Estados Unidos.