MANCHESTER, Inglaterra — “Los trabajadores debemos depender de nosotros mismos si queremos cambiar de forma fundamental las condiciones que enfrentamos”, dijo Rachele Fruit, candidata del Partido Socialista de los Trabajadores para presidente de Estados Unidos, a los participantes en un programa del Militant Labor Forum celebrado aquí el 18 de agosto. Este fue el comienzo de su gira de una semana por el Reino Unido organizada por la Liga Comunista.
“No hay una solución fácil y rápida. Pero no podemos buscar soluciones de los que son responsables de los ataques contra los trabajadores. La clase trabajadora necesita romper con los gobernantes capitalistas y sus partidos, y trazar un curso de acción política independiente.
“Nuestra campaña es la única voz en Estados Unidos que representa los intereses de nuestra clase y me refiero a nuestra clase en todo el mundo”, dijo Fruit. “Los trabajadores enfrentan condiciones similares en todas partes. Y enfrentamos un desafío internacional común: forjar un liderazgo de la clase trabajadora en un mundo marcado por una incesante crisis capitalista, convulsiones sociales y guerras”.
El dirigente de la Liga Comunista, Hugo Wils, presidió el evento. Varios de los 25 participantes se habían enterado del evento a través de la campaña de la Liga durante las recientes elecciones generales en el Reino Unido. Los candidatos del partido encontraron mucho interés en una alternativa obrera a los partidos Conservador, Laborista y otros partidos capitalistas, y a la necesidad de construir un partido obrero.
“A medida que se deterioran las condiciones de vida de la clase trabajadora y se intensifican las guerras, millones de trabajadores se ven arrastrados a la política”, dijo Fruit. “Más trabajadores están organizando sindicatos y utilizándolos para luchar”. Y es entre los trabajadores con disposición de lucha donde la campaña del PST encuentra una buena acogida.
Al día siguiente, Fruit se reunió con recolectores de boletos de trenes de la Northern Rail, que están luchando por reconocimiento sindical, el Sindicato Nacional de Trabajadores Ferroviarios, Marítimos y del Transporte. Luchas como esta empiezan a sentar las condiciones para la construcción de un partido de masas de los trabajadores, un partido obrero, dijo Fruit en la reunión. Organizaría a los trabajadores de todas las nacionalidades, religiones, colores de piel y de ambos sexos para profundizar nuestras luchas.
“Me doy cuenta, por lo que explicó Rachele, que depende de nosotros, de los trabajadores”, dijo al Militante Derek Osei Appiah, un chofer de entregas que asistió a la reunión. “Tenemos que unirnos en la lucha, construir sindicatos, construir un movimiento de la clase trabajadora”.
Defensa de libertades básicas
La campaña del PST señala la importancia de “defender las libertades constitucionales conquistadas por los trabajadores en Estados Unidos a través de años de lucha. Serán cruciales en nuestras futuras batallas”, dijo Fruit. Pero hoy están bajo ataque, especialmente por el Partido Demócrata, “mediante casos fabricados —el método habitual para perseguir a militantes obreros— y ataques a la libertad de expresión”.
En el Reino Unido se plantean cuestiones similares, dijo Fruit, tras los recientes disturbios. El gobierno ha detenido a personas basándose en lo que dicen y escriben utilizando las llamadas leyes de “crímenes de odio” que son leyes de control del pensamiento.
El curso que presentamos para los trabajadores “también se opone a la marcha de los gobernantes hacia la guerra. Durante décadas, los imperialistas norteamericanos han desplegado decenas de miles de tropas, buques de guerra y aviones de combate en Europa y en todo el Medio Oriente para proteger sus intereses. Han ampliado su presencia en Asia y el Pacífico tratando de contener la influencia de China. Y ambos partidos están discutiendo aumentar el presupuesto militar. El PST se opone a los despliegues militares de Estados Unidos en cualquier parte del mundo”.
Cambio en la política mundial
“Esto es especialmente importante tras el punto de inflexión en la política mundial que representa la invasión de Ucrania por Putin y el pogromo de Hamás en Israel el 7 de octubre con la ayuda y dirección del régimen capitalista de Teherán. En el centro de un programa de la clase trabajadora hoy está luchar contra el odio a los judíos y los pogromos, incluida la defensa de la existencia de Israel como refugio para los judíos”, dijo Fruit.
La solución a todas estas cuestiones requiere que la clase trabajadora tome el poder político, dijo Fruit.
“Es una perspectiva revolucionaria en continuidad con Lenin y los bolcheviques. No sólo es necesaria sino posible, como lo demuestran los logros de las luchas de proporciones revolucionarias en Estados Unidos: desde la guerra victoriosa por la independencia contra el dominio británico, la Guerra Civil contra la esclavitud, las gigantescas luchas obreras que llevaron a la organización de sindicatos industriales en los años 30, la lucha encabezada por el proletariado por los derechos de los negros que acabó con la segregación de Jim Crow.
“Podemos resolver la cuestión más fundamental: qué clase gobierna. Sólo quitándole el poder a los gobernantes capitalistas puede el pueblo trabajador detener la marcha hacia el fascismo y la guerra. Eso es cierto en todos los países capitalistas del mundo: Estados Unidos, Gran Bretaña, Israel, Irán, Rusia, Venezuela. Es la razón de ser del PST y de la Liga Comunista. Esperamos que se unan a nosotros en este esfuerzo”.