A pesar de la superioridad aérea y el mayor número de tropas de Moscú, el ejército ucraniano y miles de combatientes voluntarios continúan rechazando los intentos del presidente Vladímir Putin de conquistar Ucrania. Tienen el apoyo de una población civil que está cada vez más firme a pesar de que aumentan las privaciones causadas por la guerra.
“No veo personas discapacitadas. Veo superhéroes”, dijo Oleksandra Kabanova al New York Times en Lviv, mientras su esposo, Oleh Spodin, quien perdió una pierna en el frente, recibía terapia física. Dijo con orgullo que Spodin fue herido cuando se ofreció voluntariamente para ayudar a rescatar a un camarada herido. “Estás solo son condiciones nuevas en nuestras vidas a las que debemos adaptarnos”, dijo Spodin.
“Mi unidad me está esperando”, dijo Denys Kryvenko, quien perdió ambas piernas y un brazo en enero en combates cerca de Bakhmut. Él tiene planes de regresar al frente como instructor de paramédicos o consejero para los soldados. Bohdan Petrenko estaba practicando a caminar con su nueva pierna ortopédica, cuando le dijo al Times que planeaba regresar a su unidad como operador de radio o de drones.
La tenacidad del pueblo ucraniano también está inspirando a otros. Un tercio de la población de 44 millones ha sido desplazada dentro de Ucrania o en el extranjero, mientras que 2.4 millones han perdido sus empleos. La producción se ha desplomado por un 30%. Aún así muchos de los más afectados encuentran formas de ayudar a otros y donar a las fuerzas armadas para repeler la invasión.
Voluntarios en Irpin, cerca de Kyiv, usan una iglesia para servir 100 almuerzos gratis cada día a personas que han tenido que abandonar sus hogares. Un dentista móvil brinda atención gratuita a los jubilados.
Ivan Karaulov opera un bar en Kyiv y emplea a personas que como él han sido desplazadas de la ciudad de Berdyansk, dañada por la guerra. “La guerra ha demostrado que el dinero no es nada”, dijo. “Lo más valioso son las personas”.
La alta moral entre el pueblo trabajador ucraniano contrasta con la desmoralización en el ejército de reclutas de Moscú y la indignación de las familias de los soldados. Tres mujeres de Lermontovo, en la región de Amur en el Lejano Oriente de Rusia, muestran en un video del 26 de junio su protesta contra el trato que reciben sus familiares en el ejército ruso.
“Con palas, sin cartuchos, los obligan a ir a los campos minados”, dijeron. “Si no van a morir, los matarán los suyos”, por comandantes que amenazan con fusilarlos si se niegan a cumplir las órdenes, dijo una de ellas. Calificó a los oficiales de ser “no humanos”.
“Nuestros hijos están siendo arrojados al propio infierno”, dijeron los padres de soldados del regimiento 1428 en un video el 7 de julio.
OTAN: Expansión dirigida por EUA
“Los intentos de Putin de utilizar las medidas de Washington y los otros gobiernos de la OTAN para justificar su sanguinaria invasión a Ucrania son tan cínicos como falsos. Una Ucrania independiente y soberana no representa ningún tipo de amenaza militar contra Rusia”, explica una declaración emitida por Jack Barnes, secretario nacional del Partido Socialista de los Trabajadores, al comienzo de la guerra.
La guerra está acelerando la campaña de Washington y de las potencias capitalistas rivales para rearmarse y reevaluar sus alianzas, mientras se preparan para futuros conflictos para defender sus propios intereses.
Justo antes de la cumbre de la OTAN en Vilna, Lituania, el 11 y 12 de julio, los estados miembros del bloque acordaron admitir al gobierno sueco después de incorporar a Finlandia a principios de este año. Esto amplía el alcance militar de la alianza encabezada por Washington en el noroeste de Europa, incluyendo la flota de submarinos de los gobernantes suecos en el mar Báltico y la fuerza aérea de los gobernantes finlandeses.
Con la expansión de la OTAN Washington busca reforzar su posición como potencia militar “europea” dominante. Pero con el crecimiento de la OTAN también surgen mayores tensiones y conflictos entre los estados capitalistas miembros, cada uno de los cuales tiene intereses contrapuestos.
Los gobernantes norteamericanos están presionando a Kyiv para que se sume a la mesa de negociaciones. El 7 de julio el gobierno ucraniano descubrió que ex funcionarios norteamericanos y rusos habían tenido conversaciones secretas durante meses sobre el resultado de la guerra.
Washington y sus aliados de la OTAN pretenden apoyar la independencia de Ucrania, pero “lo único que realmente les preocupa es proteger sus propias ganancias e intereses políticos estratégicos en la región”, dice la declaración del Partido Socialista de los Trabajadores. Además de defender la independencia de Ucrania, el partido “exige ¡que Washington retire todas sus tropas, armamentos convencionales y nucleares y sistemas de misiles nucleares de los países europeos miembros de la OTAN en Europa!”.
La respuesta de los trabajadores en Ucrania para movilizarse y luchar valientemente contra la invasión de Moscú, junto con la oposición latente a la guerra dentro de Rusia, ha sido decisiva para impedir que Putin aplaste y subyugue al país.