“La clase trabajadora en este país debería tener más impacto. Necesitamos nuestra propia voz”, dijo Marion Franklin, una trabajadora de cuidados personales, a Helen Meyers, candidata del Partido Socialista de los Trabajadores para el senado de Estados Unidos, cuando llamó a su puerta en Shakopee, Minnesota, el 22 de septiembre.
“Necesitamos nuestro propio partido para unificar a la clase trabajadora, para defender nuestros intereses de clase”, dijo Meyers. “El gobierno y los partidos políticos que lo componen hoy representan a los capitalistas”.
“Sí”, estuvo de acuerdo Franklin. “Así es como ha sido y me temo que siempre lo será”.
“Organizándonos y luchando lograremos nuestro potencial y nos daremos cuenta de lo que realmente somos capaces”, dijo el miembro del PST David Rosenfeld. “Nos estamos organizando para construir un movimiento que pueda derrocar al gobierno capitalista y poner a la clase trabajadora en el poder”.
“Tal vez si uno empieza a luchar ahora”, dijo Franklin, “incluso si uno comienza con algo pequeño, veremos cómo será en 10 años”. Compró Malcolm X, la liberación de los negros y el camino al poder obrero y El historial antiobrero de los Clinton, ambos del secretario nacional del PST, Jack Barnes, y una suscripción al Militante. (Vea anuncio en la página 10).
Conocer a trabajadores en las puertas de sus casas en ciudades, pueblos y áreas rurales para discutir los acontecimientos políticos y el camino a seguir para la clase trabajadora y el movimiento sindical es la actividad central semana tras semana del Partido Socialista de los Trabajadores y las Ligas Comunistas en Australia, Canadá, Nueva Zelanda y el Reino Unido.
Los miembros del partido se pronuncian por todos los que son blanco de los ataques de los gobernantes capitalistas.
Estas discusiones ofrecen la mejor oportunidad para compartir experiencias y discutir un camino en respuesta a acontecimientos políticos históricos. El “orden mundial” impuesto por los gobernantes estadounidenses después de salir victoriosos de la segunda guerra mundial imperialista está en crisis y se está desmoronando.
“Necesitamos sindicatos fuertes para luchar por la seguridad y contra los recortes de salarios y empleos”, dijo la trabajadora de bodega Vanessa Goral a Catharina Tirsén, miembro de la Liga Comunista, cuando tocó a su puerta en Newbury Park en el este de Londres el 22 de septiembre. Goral relató que estuvo trabajando para una gran corporación por un año hasta que recientemente la “soltaron”. La compañía usa trabajadores de agencia que pueden “contratar y despedir de forma flexible”, dijo. Pero a pesar de que era una empleada regular de la compañía, “no importó”, dijo, porque los patrones también eliminaron su posición.
“Tenemos que superar las divisiones que los gobernantes nos imponen y forjar la unidad en la lucha”, dijo Tirsén. “Necesitamos sindicatos que parten de los intereses de los trabajadores, no de ‘la necesidad de entender los problemas que enfrentan los patrones”.
Abordando lo que es una de las discusiones más grandes entre los trabajadores aquí, el antisemitismo del opositor Partido Laborista, Tirsén dijo: “Tenemos que luchar contra el odio a los judíos y otras formas de usar gente como chivos expiatorios. Lo que está en juego para la clase trabajadora es muy importante”.
Goral dijo que ella sabía muy bien por experiencia personal de lo que Tirsén estaba hablando. “Nací aquí, pero vengo de una familia romaní de Polonia. El idioma de mi familia es el romano”, dijo. “El uso de los gitanos como chivos expiatorios es muy fuerte”.
Samantha Hamlin, miembro del PST, llamó hace poco a una puerta en Albany, donde ella y dos hermanos, Michael y Timothy Johnson, ambos trabajadores de una tienda de comestibles, comenzaron una discusión sobre lo que los trabajadores enfrentan hoy en día.
Timothy Johnson dijo que pensaba que el capitalismo “en su forma original” no tenía la intención de ser como lo es hoy, y que “la desigualdad debe ser reducida”.
“Desde el principio, el capitalismo ha estado empapado con la sangre y el sudor de los trabajadores”, dijo Hamlin. “Para obtener ganancias y poder competir, los capitalistas deben explotar la mano de obra y reducir sus costos a costa nuestra. Con el tiempo, hemos logrado algunos avances, pero solo a través de las luchas de masas, como las campañas de sindicalización de los Teamsters en la década de 1930 y la batalla para acabar con la segregación de Jim Crow. “Ambos hermanos compraron ejemplares del Militante para obtener más información.
Para unirse al partido para discutir con otros trabajadores en las puertas de sus casas, o para obtener más información sobre nuestro programa y actividades, comuníquese con la rama del PST o de la Liga Comunista de la lista en la página 8.