TRENTON, Nueva Jersey—“Nuestra gente son trabajadores, no son criminales”, dijo el reverendo Francisco Pozo, vicario de la Iglesia Episcopal de Cristo, a unas 400 personas en una manifestación para exigir licencias de conducir para todos aquí el 21 de abril. “Y merecen una licencia de conducir para poder trabajar”.
“Aquí no decimos ilegal. No decimos indocumentados”, dijo Pozo. “Decimos sin documentación de Estados Unidos porque nadie en la tierra es ilegal.”
La marcha fue organizada por Cosecha-New Jersey y atrajo personas de todo el estado. Cosecha es una organización nacional que lucha por “protección permanente, dignidad y respeto” para los inmigrantes con documentos que el gobierno de Estados Unidos no considera suficientes, según su sitio web.
Trabajadores inmigrantes; grupos de iglesias locales; miembros del Partido Socialista de los Trabajadores de Nueva York y Filadelfia; y un contingente de la Asociación de Educación de Trenton se unieron a la marcha, que culminó en la Casa del Gobernador.
Los miembros del PST llevaban carteles de apoyo a la lucha por licencias de conducir que también decían: “¡Amnistía para todos los inmigrantes ya! ¡No a las deportaciones! Organizar a los no organizados”.
Naomi Johnson-Lafleur, presidenta de la Asociación de Educadores de Trenton, fue una de las oradoras. “Nuestros padres deberían poder llevar a sus hijos a la escuela”, le dijo al Militante en la protesta. “Merecen los mismos derechos que todos los demás”.
Los manifestantes coreaban, “Sin papeles, sin miedo” y “Licencias sí, promesas no”. Durante la campaña electoral de 2017, Phil Murphy, quien fue elegido gobernador, prometió proteger a “los inmigrantes y a los soñadores”, incluso dándoles acceso a licencias de conducir, pero no ha hecho nada desde que asumió el cargo en enero.
Al igual que muchos de los que marcharon, esta fue la primera vez que Cándido Osorio, trabajador de la construcción de 32 años de edad, se unió a una protesta. Llegó a Estados Unidos desde México cuando tenía 15 años. “Ha llegado el momento cuando hay que hablar”, dijo. “Todo el mundo tiene el derecho a un trabajo digno”.
“No podemos esperar que esta gente luche por nosotros, porque ellos tienen otros intereses”, dijo el organizador de Cosecha, Alejandro Jaramillo, durante el mitin que tuvo lugar al final de la marcha, señalando las oficinas del gobernador. “Sus intereses son los intereses de las grandes empresas. Esos no son nuestros intereses.
“Tenemos que seguir organizándonos”, dijo Jaramillo. “Con nuestra fuerza laboral, nuestra fuerza en las calles”.