MONTREAL—Cuando entran en su semana final los esfuerzos para la movilización del 11 de octubre por la seguridad ferroviaria en Lac-Mégantic, Quebec, se ha venido propagando la noticia sobre la resolución aprobada unánimemente por el Consejo Municipal de Nantes que culpa al gobierno canadiense y a los patrones de la empresa ferroviaria Montreal, Maine and Atlantic Railroad por el desastre ocurrido el 6 de julio de 2013. Nantes, a solo siete millas de Lac-Mégantic, es donde estaba estacionado el tren de 72 vagones cargados de petróleo crudo antes de que empezara a rodar cuesta abajo. El tren se descarriló y explotó en el centro del pueblo causando la muerte de 47 personas.
Señalando la falta de supervisión gubernamental, los rieles desgastados, el hecho de que el dueño actual de la compañía ferroviaria, el Central Maine and Quebec Railroad, ha hecho “pocas reparaciones serias y rigurosas”, y la negativa de las autoridades de Transport Canada de promulgar nuevos requisitos para el “mantenimiento preventivo y las reparaciones inmediatas”, la resolución exige una acción inmediata de parte del gobierno para cumplir con “el derecho a la plena seguridad con respecto a los rieles”.
La resolución fue presentada al Congreso de la Unión de Municipalidades de Quebec el 26 de septiembre, donde los representantes de alrededor de 100 pueblos lo aprobaron unánimemente.
En 2012 la agencia federal Transport Canada aprobó la petición de la empresa, para, con el fin de reducir los costos y aumentar la rentabilidad, poder operar sus trenes con una “tripulación” de una sola persona.
Para desviar la atención del papel del gobierno en el desastre, un tribunal federal en Quebec, con el respaldo de los patrones ferroviarios, presentó cargos amañados contra Tom Harding, el maquinista de la locomotora, y el despachador Richard Labrie, ambos miembros del Local 1976 del sindicato de trabajadores del acero USW. Cada uno enfrenta 47 cargos de negligencia criminal que causó muertes, por lo que podrían ser condenados a cadena perpetua. Un ex funcionario de la empresa, Jean Demaître, enfrenta cargos similares.
“El gobierno federal es tan culpable como la MMA por el desastre”, dijo André Blais de la Coalición de Ciudadanos y Grupos por la Seguridad Ferroviaria en Lac-Mégantic, uno de los grupos organizadores de la protesta del 11 de octubre. La marcha comenzará a las 12:30 p.m. en el Centro Deportivo de Lac-Mégantic.
Harding cuenta con un amplio apoyo en Lac-Mégantic. Después del descarrilamiento y la explosión, él y un grupo de trabajadores pusieron sus vidas en peligro para desenganchar varios vagones llenos de petróleo que quedaban en las vías y moverlos para impedir más explosiones.
El sindicato USW ha creado un fondo especial, www.justice4USWRailworkers.org, para ayudar con el financiamiento de la defensa de los trabajadores. Un boletín del sindicato publicado en septiembre de 2014 comentó que la gente del área “compartía la opinión muy generalizada de que los trabajadores estaban siendo usados como chivos expiatorios”.
Aprovechando la campaña para las elecciones federales del 19 de octubre en Canadá, el Comité por Comunidades con Vías Seguras de Toronto envió el 31 de agosto un cuestionario a los cuatro principales partidos políticos sobre su posición en cuanto a la seguridad ferroviaria. En las respuestas recibidas hasta ahora, los partidos Liberal, Nuevo Democrático y el Verde se quejaron de los recortes presupuestarios que el actual gobierno del Partido Conservador ha impuesto a la Transport Canada. Pero ninguno planteó la necesidad de que los trabajadores ferrocarrileros tengan control sobre las condiciones laborales, ni abordaron el afán por ganancias de los patrones ferroviarios y del petróleo que cuentan con el apoyo del gobierno, ni denunciaron el caso amañado contra los trabajadores ferrocarrileros.
Los candidatos de la Liga Comunista, Beverly Bernardo en Montreal Papineau, y Joseph Young en Calgary Skyview, han estado distribuyendo una declaración con la demanda, “¡Retiren los cargos contra el maquinista Tom Harding y el despachador Richard Labrie de Lac-Mégantic!” Explica por qué los trabajadores deben unirse a la lucha contra el caso amañado contra Harding y Labrie. Ellos están promoviendo la protesta del 11 de octubre en su campaña.
“Nos unimos a los trabajadores en Lac-Mégantic que exigen que Ottawa construya una circunvalación ferroviaria alrededor del poblado”, dice la declaración. “También debemos luchar para prohibir que los ferrocarriles operen sin tripulaciones de cuatro personas” y exigir “que los trenes tengan un máximo de 50 vagones”.
Actualmente el ferrocarril transporta propano y otras cargas peligrosas y se espera que se reinicien los cargamentos de petróleo a principios de 2016.
Para más información o para enviar cartas de solidaridad a la marcha, contacte a: infosecurail154@gmail.com.
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