El 8 de enero, ex reos de Florida hicieron cola para registrarse para votar después de que la enmienda 4 a la constitución entró en vigor. Algunos llegaron más de una hora antes de que abrieran las oficinas. La enmienda se aprobó abrumadoramente el pasado noviembre, con un 64.6 por ciento del voto.
La enmienda restauró el derecho al voto de más de un millón de personas condenadas por delitos criminales en todo el estado una vez que hayan completado su sentencia. Todavía quedan excluidos los ex presos condenados por asesinato o por delitos sexuales.
“Este es un gran día para mí”, dijo el conductor de camiones Carlos Beverley a la radio WFSU en el condado de Leon después de registrarse. “Me da la oportunidad de sentirme libre de nuevo”.
El ex prisionero Desmond Meade, presidente de la Coalición por la Restauración de los Derechos en Florida que organizó la campaña para poner la enmienda en la boleta electoral y hizo campaña por su victoria, dijo a la prensa que, según su información, ningún ex prisionero fue rechazado en las oficinas electorales el 8 de enero. El fue uno de los primeros en registrarse en Orlando.
La victoria fue un avance para todos los trabajadores y ha inspirado a personas de todo el país a organizarse para luchar contra las restricciones a la franquicia para los trabajadores que han sido arrojados tras las rejas.
Antes de que se aprobara la enmienda, ex presos tenían que esperar cinco años antes de poder solicitar la restauración de su derechos de votar, y luego tenían que esperar hasta que el gobernador tomara una decisión. A menudo la respuesta era no.
El gobernador electo de Florida, Ron DeSantis, quien asumió el cargo el 8 de enero, fue uno de los que se opuso a la enmienda. El mes pasado dijo que el derecho al voto no podía ser restaurado hasta que la legislatura estatal promulgara un “lenguaje de implementación”, lo cual provocó gran indignación.
La enmienda fue aprobada debido al apoyo abrumador de trabajadores de todas las razas y perspectivas políticas. Saben que el llamado sistema de justicia penal está organizado en contra de los trabajadores, especialmente los que son negros. No creen que los presos deban ser tratados como sub humanos, ni ser castigados después de haber cumplido sus condenas. Y no les agrada que nadie intente destripar ni retrasar su voto por la enmienda.
“La enmienda fue escrita deliberadamente para evitar la participación de la legislatura o el gobernador. Es autoejecutable”, dijo Melba Pearson, directora ejecutiva interina de la ACLU de Florida, al Militante en una entrevista telefónica el 17 de diciembre. “Estamos alentando a todos los que hayan sido condenados por delito y hayan cumplido toda su sentencia a que se inscriban para votar”.