BATH, Maine — Unos 350 trabajadores del astillero en huelga y sus partidarios participaron en el “Asado de Cerdo de Solidaridad” el 3 de julio en la sede del Local S6 del sindicato mecanometalúrgico IAM. Había un tono desafiante ante el anuncio de la compañía el día anterior que emplearía a más subcontratistas para reemplazar a los huelguistas.
“Están tratando de asustar a la gente”, dijo el huelguista Jaimie Bellefleur. “Dicen que van a traer a 500 trabajadores temporarios, pero eso no llenará los 4 300 empleos ocupados por nosotros. Aquí nos mantendremos”.
La insistencia de los patrones de utilizar más contratistas es uno de los asuntos centrales de la huelga, junto con sus intentos de socavar los derechos de antigüedad y aumentar los costos del seguro médico. La huelga de los 4 300 miembros del Local S6 contra Bath Iron Works se encuentra en su tercera semana.
Este corresponsal obrero del Militante —un obrero ferroviario cesanteado— vino con trabajadores y jóvenes de Albany y Boston, así como con Alyson Kennedy y Malcolm Jarrett, los candidatos del Partido Socialista de los Trabajadores para presidente y vicepresidente, para brindar solidaridad a los huelguistas.
“Según el contrato que la compañía quería que firmáramos, te pueden asignar cualquier trabajo relacionado con tu oficio”, nos dijo Jerry Roy, quien ha trabajado en Bath durante 39 años. “También podrían usarlo para castigar a los trabajadores por presentar quejas”.
“Pensé que muchos trabajadores más jóvenes votarían por el contrato. Cuando escuché que el 87 por ciento había votado en contra, podrías haberme tumbado con una pluma”, dijo. “La compañía intentó obtener votos ofreciendo un bono de 1 200 dólares, pero no les funcionó”.
Mike Hill, un instalador de tuberías que trabajó en una fábrica de papel sin sindicato antes de trabajar en el astillero, dijo, “Incluso actualmente la gente habla de la huelga de 1987. Es una gran diferencia trabajar aquí en comparación con la fábrica de papel donde los patrones habían destruido el sindicato”.
Parker Robitaille, con 20 años de edad, y para quien este es su primer trabajo sindicalizado, dijo que le “alegraba que las personas luchen por lo que creen, aunque estén sacrificando sus ingresos. Me siento parte de algo. Es más que un trabajo para mí”.
Entre los asistentes al asado solidario se encontraban miembros del Local S7 del IAM, que representa a 300 trabajadores administrativos en el astillero. Ellos no están en huelga, pero los miembros se unen a la línea de piquetes. Britni Beaulieu, quien trabaja como empacadora, me dijo: “Nuestro contrato se vence en abril y lo que ocurra en esta huelga también nos afectará”.
Con la intención de provocar fricciones entre los dos sindicatos y debilitar la huelga, la compañía anunció el 7 de julio que despediría a algunos miembros del Local S7. “Los trastornos que causa la huelga no nos dejan otra opción”, escribió el presidente de BIW, Dirk Lesko, en una carta enviada a los trabajadores.
La huelga continúa recibiendo solidaridad. Cuando estaba en la línea de piquetes el 1 de julio, conocí a Dean Staffieri, miembro de la Asociación de Empleados de Servicio de Maine. Me dijo que la MSEA apoya la huelga y agregó: “Si no puedes ser solidario, pierdes”.
El Local 2326 del IAM en Clinton, Maine, recaudó y envió una contribución de 614 dólares. Miembros del Local 207 del IAM, que representa a los Langosteros, se unieron a la línea de piquetes, al igual que los del Local 1505 del sindicato de electricistas IBEW. Trajimos una tarjeta firmada por 13 trabajadores de una tienda de Walmart en Albany, Nueva York, que entregamos a los dirigentes sindicales durante el asado.
Hay cuestiones importantes en juego en esta batalla. Únase a las líneas de piquetes. Consiga mensajes de apoyo de su unión, iglesia o de compañeros de trabajo. Envíe mensajes y contribuciones a IAM Local S6, 722 Washington St., Bath, ME 04530, o contribuya en https://www.paypal.me/LocalLodgeS6