Represión no logra parar las protestas en Irán

Por Seth Galinsky
14 de noviembre de 2022
Noviembre 2, primer día de huelga de trabajadores del departamento de mantenimiento de la refinería de petroleo Asaluyeh en la provincia de Bushehr en el sur de Irán.
Organizing Council of Oil Contract WorkersNoviembre 2, primer día de huelga de trabajadores del departamento de mantenimiento de la refinería de petroleo Asaluyeh en la provincia de Bushehr en el sur de Irán.

“No salgan a las calles. Hoy es el último día de disturbios”, dijo Hossein Salami, comandante del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica en Irán, el 29 de octubre, amenazando a los manifestantes de que continuar las protestas “no les traerá un final feliz”.

Pero al día siguiente, las protestas diarias continuaron en los recintos universitarios y escuelas secundarias y en pequeños pueblos rurales y grandes ciudades de todo el país, desde las provincias pobladas por nacionalidades oprimidas hasta las que tienen una mayoría chiita. Los manifestantes coreaban “Mujeres, vida, libertad” y “Abajo el dictador”, y cantaban canciones de protesta.

El presidente iraní Ebrahim Raisi hizo declaraciones calumniosas de que las protestas “preparan el terreno para actos terroristas”, después de que un ataque contra un santuario musulmán chiita en la ciudad de Shiraz el 26 de octubre dejó 14 muertos. El Estado Islámico se atribuyó la masacre.

En el transcurso del fin de semana, matones del Basij, una fuerza paramilitar dirigida por la Guardia Revolucionaria, aumentaron sus ataques contra los manifestantes. En algunos casos, dispararon munición real. Pero el movimiento de protesta continúa sin cesar.

Las protestas comenzaron tras la muerte de Mahsa Amini el 16 de septiembre. La joven kurda murió tres días después de colapsar tras su arresto por la policía “de la moral” por supuestamente no respetar el código de vestimenta del régimen reaccionario. Pocos creen la versión oficial de que la policía no la golpeó.

Su muerte desató la ira acumulada por las violaciones del régimen clerical burgués de los derechos democráticos, la opresión de la mujer y la discriminación contra las nacionalidades oprimidas y las minorías religiosas. Las protestas también reflejan una profunda oposición al precio humano de las aventuras bélicas del régimen en todo el Medio Oriente.

El verdadero nombre de Amini no es Mahsa, sino Jina, que significa “vida” en kurdo. Para ser reconocidos legalmente, los nombres en Irán deben ser aprobados por el Consejo Supremo de Registro. Debido a que el consejo rechaza rutinariamente los nombres que según ellos fomentan la identificación nacional kurda, muchas familias kurdas dan a sus recién nacidos dos nombres, uno para el registro oficial y otro para familiares y amigos.

Opresión de los kurdos

Alrededor de 30 millones de kurdos viven en Turquía, Iraq, Irán, Armenia y Siria, la nacionalidad más grande del mundo sin su propio país. En Irán, como en otros lugares, enfrentan discriminación en el trabajo, la vivienda y el uso de su idioma en la escuela. Casi la mitad de los presos políticos de Irán son kurdos. Los gobernantes de Irán han estado bombardeando campos de kurdos iraníes en Iraq.

Miles de personas asistieron a la ceremonia de duelo de 40 días en Saqqez, la ciudad natal de Amini, en la región kurda, el 26 de octubre, a pesar de los bloqueos del gobierno de las carreteras que conducen al cementerio y sus afirmaciones de que la familia no quería el evento.

Un artículo publicado por la Agencia de Noticias de Estudiantes Iraníes, financiada por el gobierno, refleja la profundidad del creciente movimiento. “La gente se ha vuelto desconfiada de muchas cosas y no cree las palabras de los medios oficiales”, escribió el reportero de ISNA.

“Había venido a Kurdistán antes”, escribió el reportero, “pero hoy vi una nueva actitud entre la gente”.

Las protestas por todo el país demuestran que la “nueva actitud” no existe solamente entre los oprimidos kurdos, azerbaiyanos y baluchis.

El gobierno ha estado intensificando sus medidas contra las protestas. El 31 de octubre, el presidente del Tribunal Supremo de Teherán anunció que esa semana comenzarán los juicios públicos de mil de los arrestados en la capital. Algunos informes dicen que más de 100 han sido asesinados.

El 31 de octubre hubo confrontaciones entre los matones de Basij y los estudiantes manifestantes en la Universidad de Teherán. Cuando la Guardia Revolucionaria rodeó la universidad para impedir que salieran los manifestantes, los padres y familiares corrieron hacia el recinto para evitar más violencia.

El Consejo Organizador de Trabajadores Contratistas del Petróleo anunció el 30 de octubre que iba a posponer temporalmente una huelga nacional convocada para el 29 de octubre para exigir la liberación de todos los presos políticos y sindicales. “Un gran número” de sindicalistas han sido arrestados, dijo el sindicato y necesitan tiempo para “más preparativos”.

“Volvemos a declarar que los trabajadores no se quedarán callados”, dijo el sindicato. “Los trabajadores petroleros somos parte del mismo pueblo que está protestando contra la pobreza, la opresión de las mujeres y para tener una vida digna”.