NUEVA YORK—Cientos de manifestantes, incluyendo familiares, se concentraron frente al Centro de Detención Metropolitano federal en Brooklyn durante el fin de semana del 1 al 3 de febrero, para protestar por la falta de calefacción y electricidad dentro de la prisión en medio de una ola de frío. Los presos golpeaban las ventanas de sus celdas mientras los manifestantes gritaban “Muévanlos”.
El 27 de enero, un incendio destruyó el panel eléctrico principal en la sección de hombres y cortó toda la calefacción, las luces, el agua caliente y las conexiones al internet. Y desde el 31 de enero, los reclusos fueron confinados a sus celdas durante 23 horas al día. La cárcel tiene más de 1 600 presos, en su mayoría detenidos en espera de juicio.
El alcalde Bill de Blasio y otros políticos liberales condenaron hipócritamente las condiciones en la cárcel. Estos mismos funcionarios no han hecho nada para lidiar con la falta de calefacción en gran parte de las viviendas públicas administradas por la ciudad. Y de Blasio es el jefe de la manifiestamente abusiva prisión de Rikers Island en esta ciudad.