Los más de 20 candidatos que están compitiendo por la nominación presidencial del Partido Demócrata quieren disputarse con el presidente Donald Trump el puesto de director ejecutivo de la clase capitalista y el mando de sus fuerzas armadas en las guerras que los gobernantes estadounidenses libran por todo el mundo.
Durante los debates del Partido Demócrata, todos los candidatos ofrecieron formas de remendar el sistema de explotación y opresión, lo opuesto al curso que presentan los candidatos del Partido Socialista de los Trabajadores: unificar y movilizar al pueblo trabajador para derrocar ese sistema.
“El capitalismo ha dejado de tener un papel productivo en la sociedad. Necesitamos construir un movimiento obrero, independiente de los dos partidos capitalistas, que luche para que la clase trabajadora avance hacia la toma del poder político”, dijo al Militante Malcolm Jarrett, candidato del PST para el consejo municipal de Pittsburgh.
Jarrett y otros candidatos del PST en todo el país están presentando esta perspectiva política mientras hacen campaña de puerta a puerta en vecindarios de la clase trabajadora, en protestas sindicales y en líneas de piquetes y otras manifestaciones. Jarrett entregó el 30 de julio 240 firmas para que su nombre aparezca en la boleta electoral para el Distrito 1 del concejo municipal.
“Mi campaña exige una amnistía para los trabajadores indocumentados”, dijo Rachele Fruit, candidata del PST para la junta escolar de Atlanta, al obrero de la construcción Philip Whiting en su casa en esa ciudad, el 3 de agosto.
“El gobierno quiere hacer más difícil que organicemos sindicatos manteniendo a una sección de la fuerza laboral bajo el temor de ser deportados”, explicó Fruit.
Whiting compró una suscripción al Militante y un ejemplar de ¿Son ricos porque son inteligentes? por Jack Barnes, secretario nacional del PST.
“El mayor obstáculo que enfrentamos es nuestra tendencia a subestimarnos, a subestimar lo que podemos lograr. Es por eso que necesitamos construir nuestro propio partido, independiente de los partidos patronales”, dijo Pierre-Luc Filion, candidato de la Liga Comunista en las elecciones federales en el distrito electoral de Longueuil-St. Hubert, a Jean-Guy Touchette, un empleado de oficina en Bombardier, mientras iban de puerta en puerta el 2 de agosto en Montreal.
Filion habló en una protesta el 3 de agosto en Ottawa, para exigir que las autoridades de Argelia pongan en libertad a personas arrestadas durante las manifestaciones antigubernamentales. En abril, el presidente Abdelaziz Bouteflika se vio obligado a renunciar y los trabajadores exigen el fin del gobierno militar.