“Siempre voy a decir que sí”, dijo el enfermero cubano Hugo César González López a Juventud Rebelde, “para lo que sea, cuando sea, donde sea”, que se necesiten nuestras misiones médicas. González es parte de los voluntarios cubanos que están combatiendo la epidemia de coronavirus en Italia. El gobierno de Cuba ha movilizado a más de mil trabajadores de la salud hacia 22 países desde el brote de COVID-19.
González habló con orgullo sobre su experiencia en la misión médica voluntaria de Cuba para erradicar la propagación del ébola en Sierra Leona, en África Occidental. A principios de abril, el gobierno cubano envió 473 médicos y enfermeras a ocho países caribeños, uno de los despliegues más grandes y rápidos de trabajadores de la salud que jamás haya organizado.
“Aun afrontando el propio reto de contener la COVID-19 en el territorio nacional, Cuba considera indispensable contribuir al necesario incremento de la solidaridad”, dijo José Carlos Rodríguez Ruiz, embajador cubano en Italia, cuando un segundo contingente de voluntarios cubanos llegó allí el 13 de abril. “Brindamos lo que podemos y tenemos, no lo que nos sobra”.
El trabajo de estos voluntarios se apoya en décadas de labor internacionalista de las misiones médicas cubanas. “Van a un lugar donde enriquecerán esa historia”, dijo Jorge Juan Delgado, director de la Unidad Central de Cooperación Médica, en la despedida de 20 voluntarios rumbo a Honduras el 19 de abril.
Los 30 mil trabajadores médicos cubanos en misiones en 65 países son una fuente de confianza y orgullo para el pueblo trabajador cubano.
A diferencia de otros países, el gobierno y el pueblo cubanos son producto de la revolución socialista realizada por millones de trabajadores y campesinos en 1959. Esa lucha transformó al pueblo cubano. Las prioridades del gobierno se toman en base a los valores morales y las necesidades de la mayoría trabajadora. Dirigidos por Fidel Castro y el Movimiento 26 de Julio, el pueblo trabajador derrocó a la dictadura de Fulgencio Batista y derribaron el dominio capitalista.
Los trabajadores asumieron la responsabilidad de dirigir la sociedad, algo que los gobernantes capitalistas de todo el mundo nos dicen es “imposible”, profundizando su confianza en el proceso, y han defendido, armas en mano, los incesantes esfuerzos de Washington para restaurar el dominio capitalista.
Movilizan trabajadores, estudiantes
El gobierno está movilizando a estudiantes de medicina y miembros de los Comités de Defensa de la Revolución, los cuales están basados en los barrios, y de otras organizaciones de masas para visitar a cada persona en la isla para verificar si tienen síntomas de coronavirus o si necesitan ayuda. Hasta el 19 de abril, habían visitado a 9 millones de los 11.2 millones de habitantes del país. Muchos son visitados diariamente. Si tienen síntomas, se les envía a ver al médico.
“Es deber de los jóvenes asumir responsabilidades, como revolucionarios y ciudadanos cubanos”, dijo Indira Guevara a Juventud Rebelde. Ella es una de los miembros de la Unión de Jóvenes Comunistas que se han ofrecido como voluntarios para evitar la aglomeración de personas en las tiendas y mercados en Nueva Gerona, Isla de la Juventud. Las relaciones sociales que fluyen del principio que “nunca dejamos a nadie abandonado” establecidas por la revolución continúan caracterizando a todas las generaciones.
Al igual que en Nueva Gerona, el gobierno estableció una cuarentena en Camilo Cienfuegos, un pequeño pueblo de Pinar del Río, luego de que se confirmaran casos de coronavirus.
Las iniciativas para apoyar a las personas allí incluyen la entrega, edificio por edificio, de una canasta básica de alimentos a precios subsidiados, y de alimentos preparados a los ancianos. El trabajo de desinfectar regularmente las calles y las plazas realizado por trabajadores de fuera del área ha sido asumido por voluntarios de la ciudad. Trabajadores de áreas vecinas están realizando el trabajo de los trabajadores agrícolas en cuarentena para garantizar que la producción de alimentos continúe.
Los gobernantes capitalistas en todas partes están enfrentando la crisis social mundial con cierres y despidos masivos. El gobierno revolucionario cubano ha recurrido a los trabajadores para evitar un aumento en la escasez de necesidades básicas. Ante el inicio de la temporada de siembras en la provincia de Camagüey, los sindicatos iniciaron una brigada de trabajo voluntario para sembrar yuca. Con la decisión del gobierno de suspender el desfile del Primero de Mayo de este año, en el que cientos de miles marchan para expresar su determinación de defender su revolución, los sindicalistas de Camagüey nombraron a su contingente la Brigada del 1 de Mayo.
La guerra económica de los gobernantes norteamericanos contra Cuba continúa creando obstáculos para importar suministros necesarios. En marzo, un envío, que incluye kits de prueba de coronavirus y ventiladores donados por el empresario chino Jack Ma, fue bloqueado y no pudo llegar a Cuba. La aerolínea colombiana que lo transportaba se negó a entregarlo, mencionando su temor a las represalias de Washington.
Los gobernantes norteamericanos nunca cesarán en sus esfuerzos para derrocar al gobierno revolucionario. Cuba ofrece un ejemplo a los trabajadores de todo el mundo de las capacidades ilimitadas de nuestra clase para enfrentar los desafíos, cuando trazamos un curso para tomar el poder político.