Urge luchar por el control obrero de la producción

Afán de ganancias de patrones lleva a muertes de trabajadores

Por Janice Lynn
15 de febrero de 2021

GAINESVILLE, Georgia — Seis trabajadores de la planta procesadora de pollos Foundation Food Group murieron el 28 de enero tras la ruptura de una línea de nitrógeno líquido. En la planta no hay un sindicato.

Cinco de los trabajadores murieron en la fábrica. Una decena de trabajadores fueron trasladados a una sala de emergencias con lesiones y dificultades respiratorias. Uno de ellos murió en el hospital y tres se encuentran en estado crítico. Unos 130 trabajadores tuvieron que ser evacuados y la planta permanece cerrada.

“Trabajo en el área donde ocurrió la fuga de nitrógeno”, dijo María Caudillo al Militante mientras estábamos sentados en su cochera. “No sé qué pasó. Me desmayé y cuando desperté estaba en el hospital”. Ella pidió que no usáramos su nombre verdadero en este artículo. “Nunca esperé que sucediera algo como esto y nos ha afectado a todos”.

Caudillo dijo que gana 11.60 dólares la hora y trabaja muchas horas. No ha oído nada de sus supervisores desde el incidente.

La Junta Federal de Investigación de Riesgos y Seguridad Química dijo que grandes partes del sistema de nitrógeno líquido de la planta fueron instaladas en las últimas cuatro a seis semanas.

Foundation Food Group fue formado de una fusión entre Prime Pak Foods y Victory Processing el 1 de enero. Prime Pak tiene un largo historial de citaciones por parte de la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional por violaciones graves de la salud y seguridad.

“Los trabajadores merecen un ambiente seguro”, dijo a esta corresponsal Pedro López,  cuando iba de puerta en puerta por el área hablando con trabajadores. López trabajó como mecánico de mantenimiento durante seis años en una planta procesadora de pollos hace varios años. “Si ve que no es seguro, uno debería poder negarse a hacerlo, y todos deberían unirse y hablar cuando algo no es seguro”, dijo.

Los trabajadores fallecidos fueron José De-Jesús Elías Cabrera, Corey Alan Murphy, Nelly Pérez Rafael, Saulo Suárez Bernal, Víctor Véllez y Édgar Vera García.

Hay unos 45 mil trabajadores en las procesadoras de pollos en Georgia, muchos en el área de Gainesville, 50 millas al norte de Atlanta.

“Conozco a muchos de los que trabajan en Pilgrim’s Pride y describen que el trabajo es duro y las condiciones muy frías”, dijo al Militante Ronald Araújo, quien trabaja en la pupusería y restaurante de su familia, y agregó que uno de los muertos era un cliente habitual. “Muchos no tienen los ‘documentos correctos’ y las empresas se aprovechan de eso, pensando que los trabajadores no se van a defender”.

“Si hubieran seguido procedimientos de seguridad simples, las vidas de los trabajadores no habrían estado en juego”, dijo Stuart Appelbaum, presidente del sindicato RWDSU, en un comunicado emitido el 28 de enero. “La atroz falta de normas en las plantas no sindicalizadas como la de Gainesville les costó la vida a los trabajadores esenciales hoy”. La RWDSU representa a más de 15 mil trabajadores en plantas de pollos del sur.

Rachele Fruit, candidata del Partido Socialista de los Trabajadores para alcaldía de Atlanta, quien trabaja como cajera en Walmart y trabajó en el pasado como empacadora de carne, asistió a una vigilia el 30 de enero y habló con los trabajadores yendo de puerta en puerta en Gainesville.

“Ningún trabajador tiene que morir en el trabajo”, les dijo a los trabajadores. “Cuando nos unimos y luchamos por un sindicato en nuestro centro laboral, podemos tener voz y voto sobre nuestros salarios y condiciones de trabajo. El trabajo se puede organizar de forma segura si los trabajadores toman el control de la producción. Los patrones escatiman en las precauciones de seguridad y aceleran la línea para maximizar sus ganancias.

“La amnistía para todos los inmigrantes indocumentados es una cuestión crucial para unir a los trabajadores y socavar las divisiones que los patrones usan para reducir los salarios”, dijo. “Nuestros sindicatos deben romper con los dos partidos de los patrones: los demócratas y los republicanos. Los trabajadores necesitamos nuestro propio partido, un partido obrero”.