“Ojala hubiera un sindicato en donde trabajo”, dijo Stephen Hammond a Róger Calero, el candidato del Partido Socialista de los Trabajadores para alcalde de Nueva York, cuando llamó a la puerta de su casa en Middletown, Nueva York, el 17 de octubre. “El humilde tiene el mismo problema en todas partes. Están tratando de sacar más productividad de menos trabajadores”.
Calero le había mostrado a Hammond los titulares del Militante que llaman a brindar solidaridad a los trabajadores en huelga en Kellogg y otras batallas sindicales. Describió cómo tres días antes más de 10 mil trabajadores de John Deere se habían declarado en huelga en todo el país. El Militante y los candidatos del Partido Socialista de los Trabajadores de todo el país están promoviendo la solidaridad con estas batallas.
Hammond, un ingeniero de software, se suscribió al Militante y contribuyó con cinco dólares al Fondo para la Construcción del Partido. Los partidarios del PST de Albany y de la ciudad de Nueva York vendieron cinco suscripciones y recolectaron 34 dólares en contribuciones en solo un par de horas yendo de puerta en puerta en Middletown y Florida, Nueva York.
Los activistas del PST están encontrando un interés similar dondequiera que van como parte de la campaña internacional de siete semanas para vender 1,300 suscripciones y 1,300 libros de dirigentes del PST y otros revolucionarios y para recaudar 130 mil dólares para el Fondo para la Construcción del Partido que se hace anualmente.
El Militante es único. Brinda informes de primera mano sobre las luchas obreras. El número de la próxima semana incluirá una entrevista con Carlos Fernández de Cossío, jefe del departamento de asuntos de Estados Unidos del ministerio de relaciones exteriores de Cuba. Cossío explica por qué “el desafío más prolongado y exitoso para el imperialismo en el hemisferio occidental ha sido la Revolución Cubana”.
Semana de esfuerzo especial
La campaña internacional recibirá un impulso con el esfuerzo especial de 12 días que comenzará el 22 de octubre para presentar el programa del Partido Socialista de los Trabajadores y sus candidatos obreros a la mayor cantidad posible de trabajadores en la última semana antes de las elecciones del 2 de noviembre.
Los candidatos del PST están participando en las líneas de piquetes, divulgando las manifestaciones de solidaridad con las huelgas, hablando con los trabajadores en sus puertas y uniéndose a las protestas para defender los derechos de la mujer, incluido el derecho a elegir un aborto. Al hacerlo, presentan un camino revolucionario.
“Los patrones no quieren que tengas una vida”, le dijo Armil Scott a Sara Lobman, candidata del Partido Socialista de los Trabajadores para presidente del municipio de Manhattan y al partidario de la campaña Brian Williams, cuando llamaron a su puerta en Castle Hill en el Bronx el 17 de octubre. “Trabajamos demasiadas horas y nos pagan mal”, dijo Scott, quien trabaja entregando repuestos para automóviles, con un horario de 55 horas a la semana o más. “El trabajo es brutal”.
La aceleración del ritmo de trabajo, las horas extras obligatorias y los sistemas de dos niveles de salarios y beneficios están al centro de muchas de las huelgas de hoy, dijo Lobman. Scott se suscribió al Militante y compró un ejemplar de El viraje a la industria: Forjando un partido proletario del secretario nacional del PST, Jack Barnes. Explica el tipo de partido y programa de la clase trabajadora que se necesita para arrebatar el poder a los explotadores capitalistas. Es uno de las decenas de libros en venta especial como parte de la campaña. (Vea anuncio en la página 6.)
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