“Ninguno de los políticos se preocupa por la clase trabajadora”, dijo la oficinista Bernadette Keating a Ögmundur Jónsson, miembro de la Liga Comunista, cuando él llamó a su puerta en Manchester, Inglaterra, el 23 de abril. “Necesitamos un nuevo partido para sacudir las cosas”. Le alegró saber que la liga está postulando a Peter Clifford, un ferroviario y sindicalista, para el ayuntamiento de Manchester en las elecciones del 4 de mayo.
Los trabajadores deben romper con los partidos Conservador y Laborista y todos los partidos capitalistas, dijo Jónsson. “Necesitamos construir nuestro propio partido de los trabajadores, basado en nuestros sindicatos. Eso comienza en las líneas de piquetes de hoy, con los trabajadores usando y fortaleciendo nuestros sindicatos”.
Keating compró el libro Ya superamos el punto más bajo de la resistencia del pueblo trabajador: El Partido Socialista de los Trabajadores mira hacia adelante y una suscripción al Militante. Cuando Jónsson dijo que el Militante está financiado por sus lectores, Keating aportó 8 dólares para el Fondo de Lucha del Militante.
Intercambios como este están ocurriendo de Nueva York a Los Angeles, de Londres a Sydney, a medida que los miembros del Partido Socialista de los Trabajadores y las Ligas Comunistas en Australia, Canadá y el Reino Unido amplían el alcance de la literatura revolucionaria. Nuestra meta es vender 1,350 suscripciones, la misma cantidad de libros y recaudar 165 mil dólares para el fondo antes del 16 de mayo.
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