ANTIOCH, California — “Haré correr la voz sobre la lucha de ustedes”, dijo el candidato del Partido Socialista de los Trabajadores para vicepresidente de Estados Unidos, Dennis Richter (a la der.), a los trabajadores en huelga de Georgia-Pacific aquí cuando se unió a la línea de piquetes el 7 de octubre. Los miembros del Local 6 del sindicato internacional de trabajadores portuarios y de almacenes ILWU y los del Local 1584 del sindicato de trabajadores mecanometalúrgicos IAM estaban entrando en su cuarta semana de huelga.
Jimmie Arnold III le dijo a Richter que están luchando por un aumento salarial, condiciones de trabajo seguras y horarios sostenibles. Arnold, como la mayoría de los trabajadores de la planta, nunca había estado en huelga.
“Durante la campaña he viajado a diferentes partes, incluso a otros países, y he visto a trabajadores luchando por estas mismas cosas”, dijo Richter. “Los trabajadores luchan para ganar lo suficiente para vivir y luego el aumento de los precios nos quita lo que hemos ganado”.
“¡Eso es lo que está pasando!”, dijo Steve Moffett, quien trabaja en la planta desde hace tres años.
“Necesitamos incluir clausulas en todos los contratos para que aumente los salarios cada vez que aumente el costo de vida”, dijo Richter.
“Tenemos que trabajar con sustancias químicas peligrosas. Hay fibra de vidrio en el aire y lo único que nos dan es una mascarilla normal”, dijo Arnold. “La empresa podría pagar por mejor equipo de ventilación, pero no quiere gastar dinero”.
“Tenemos que luchar para que los trabajadores tengan control sobre las condiciones, la capacitación y la seguridad en el trabajo”, dijo Richter. “Necesitamos nuestro propio partido, un partido de los trabajadores, porque los dos partidos de los patrones defienden los intereses de la pequeña minoría adinerada”.